En la puerta de las escuelas de Famaillá se reparten votos y la Policía debe pedirles a los conductores de los autos que acarrean votantes que les quiten los carteles con los que están identificados.

La mañana electoral arrancó con intensidad en esta ciudad del interior tucumano. Cuando LA GACETA llegó a la escuela Diego de Rojas, a unas ocho cuadras de la plaza principal de la ciudad, había personas repartiendo votos en la puerta del establecimiento. Al advertir que estaban siendo fotografiados, se subieron a una moto y se fueron del lugar.


Poco después, un auto que llevaba adherido un cartel con la leyenda “Enrique Romano apoya a Jaldo” se estacionó en el playón del establecimiento.


Cuando las autoridades de electorales que estaban en el establecimiento se dieron cuenta de lo que ocurría, le pidieron que retire el cartel. Para ello tuvo que intervenir la Policía.

Pero no era el único vehículo con estas características en las inmediaciones de la escuela. Muchos otros identificados con números o nombres de dirigentes iban venían hacia la escuela en la que, según el padrón, debe votar el diputado nacional José Orellana.