Los festejos por Año Nuevo trajeron serias consecuencias. En el hospital Padilla, en la capital provincial, se registraron hasta el momento 25 casos de traumatismo oculares, una significativa cantidad según fuentes oficiales. Dos de ellos fueron considerados graves, con riesgo de pérdida de la visión.

Desde la medianoche, según información del centro de asistencia de alta complejidad, ingresaron pacientes de 20 y 40 años, quienes habían sufrido el impacto en los ojos del corcho de una botella o por el uso de pirotecnia, entre otras causas.

También han sido asistidos 25 accidentados de tránsito: hubo un muerto.