JACKSONVILLE, ESTADOS UNIDOS.- Una historia de fidelidad emociona a los Estados Unidos y al mundo. Kelly Black tenía 42 años y, como todas las mañanas, estaba paseando a Paco, su perro, por las calles de Jacksonville, la capital del estado de Florida. En un descuido, la mujer fue atropellada y arrastrada varios metros por un camión que se dio a la fuga y dejó que muriera en el lugar.

Cuando personal de la policía y los paramédicos llegaron hasta la escena del accidente para cubrir el cuerpo de la mujer, se encontraron con una escena tan emotiva como desgarradora: una vez que retiraron el cuerpo de Black, el perro se quedó en el lugar donde acababa de morir. 

Este conmovedor hecho sucedió el pasado 23 de octubre. "Paco" permaneció a la mitad de la ruta durante horas esperando que Kelly regresara por él. Sin embargo, fueron los familiares de la mujer quienes tuvieron que pasar por el animal y llevarlo a casa. La familia de la víctima manifestó que el perro y su dueña eran inseparables.