Los principales enemigos de “Los cuatro fantásticos” son ellos mismos; mejor dicho, el recuerdo de quienes vieron la película filmada hace 10 años por Tim Story, que cada tanto vuelve a la televisión hogareña en los canales de cable. Y siempre con éxito y seguidores.

Esos fanáticos son los que primero estarán en la cola de los cines cuando hoy estrenen la nueva versión con los mismos personajes y la misma historia. Nada cambiará: estarán la muy hermosa mujer invisible; su juguetón medio hermano, la Antorcha Humana; un extraordinariamente elástico ser; y, por último, el poderoso y enorme hombre roca, todos afectados por una radiación que alteró su ADN en una teletransportación fallida a otra dimensión y los transformó en salvadores del mundo, cuando 100 años antes no hubiesen pasado de fenómenos de circo (los famosos freaks norteamericanos).

Pero no todo es absolutamente una copia lineal de lo hecho hace una década. Uno de los cambios que ofrece el modelo 2015 de la historia nacida (cuándo no) de la mente de Stan Lee está centrado en Reed Richards, el hombre elástico. Esta vez no sólo será su cuerpo el que cambie de forma y se estire, sino que su mayor superpoder será alterar físicamente su entorno y, de esa forma, modificar lo que ocurre.

Más allá de las reservas previas, la película llega con un pergamino: se alzó con el premio mayor en su categoría en la convención CinemaCon realizada en Las Vegas hace poco más de tres meses, en medio de fanáticos de los comics, y con buenas críticas de quienes la vieron. Varias fueron para el pulso del director Josh Trank, quien sólo tenía como antecedente “Poder sin límites”, un filme que mezcló terror con ciencia ficción.

Las responsabilidades actorales recayeron en Kate Mara, Michael B. Jordan, Miles Teller y Jamie Bell, respectivamente, nombres en crecimiento constante pero que no tienen aún suficiente brillo propio como para arrasar en las taquillas. Allí, el sello “Los cuatro fantásticos” es lo central, por encima de sus intérpretes, por cierto más jóvenes que los de 2005, lo que indica sutilmente la edad del público al que se apunta inicialmente. Del cuarteto sobresale Jordan, quien compuso al traficante adolescente Wallace en “The wire”, un hito en su larga carrera en la televisión.

El objetivo comercial es relanzar a este grupo en una saga nueva de películas que los tengan de protagonistas (ya se anunció la segunda para 2017, aunque condicionada al éxito de la que se estrena). Pero también volverlos a poner en juego, para que aparezcan en otros filmes de este género, entrecruzándose historias, personajes y aventuras técnicamente bien filmadas (ya trascendió que estarán en la próxima película de los X Men), todo al servicio del divertimento pochoclero de un domingo lluvioso.