El sistema de salud provincial no sólo carece de infraestructura adecuada, sino que también es deficitario en materia de profesionales. Así lo aseveró Adriana Bueno, médica del Hospital Regional de Concepción y secretaria General del Sindicato de Trabajadores Autoconvocados de la Salud de Tucumán (Sitas), en referencia al informe publicado en LA GACETA, que revela el drama de miles de tucumanos que esperan durante la madrugada para ser atendidos en los hospitales. De esta manera respondió también a los dichos de Fernando Avellaneda, secretario Ejecutivo Médico del Ministerio de Salud, que provocaron malestar entre los profesionales del área. “Muchas veces, el profesional o el equipo de salud del CAPS no se compromete del todo con esto (se refirió al sistema de referencia y contrareferencia, para realizar interconsultas y asignar turnos programados); el médico no le dice al paciente: ‘deberías ver al reumatólogo, yo me encargo de conseguirte turno”, había respondido el funcionario.

“Bajo ningún punto de vista nos pueden hacer cargo a nosotros de los errores de comunicación del sistema. Pocas veces se consigue que las decisiones tomadas arriba sean transmitidas a las bases. Los profesionales de la salud no hemos recibido capacitación sobre el sistema de referencia y contrarreferecia; y si funciona, lo poco que funciona, es por la buena voluntad de los médicos, que utilizamos nuestros teléfonos particulares para hacer interconsultas y poder conversar con nuestros colegas sobre los pacientes, porque no hay una estructura: ni escáner, ni internet, ni teléfono con salida directa. Sobre todo en el interior funciona de manera muy precaria”, fueron las contundentes palabras de Bueno.

Al igual que Avellaneda, Bueno sostuvo que los pacientes del sistema público están poco familiarizados con la modalidad de turnos programados. “Pero si es algo tan arraigado, entonces para cambiarlo hay que asignar más recursos, más energías y más personal para conseguir un cambio de paradigma. Se necesitan personas involucradas para poder transmitir estos cambios a los 18.000 agentes que tiene el sistema y también al público”, opinó.

La médica autoconvocada remarcó, finalmente, que en algunos CAPS y hospitales del interior faltan especialistas, lo que termina abarrotando los servicios de la capital. “En Concepción, que atiende también a pacientes de Alberdi y de otras localidades, tenemos sólo un médico neurólogo y un cardiólogo, por ejemplo. Es muy poco. Tiene que existir la decisión política de incorporar más personal y también de distribuirlo mejor, porque el sistema se salud no termina en las cuatro avenidas”, disparó.

En la Defensoría

El defensor del pueblo, Hugo Cabral, calificó de “cruel” el sistema de asignación de turnos por orden de llegada, tanto en el ámbito privado como en el público. Sin embargo, informó que todos los reclamos que se recibieron en su oficina vinculados a la salud tuvieron que ver con turnos asignados a muy largo plazo. “Es gente que no puede esperar dos meses para que lo atienda un especialista, entonces acudió a la Defensoría. En todos los casos, conseguimos revertir la situación comunicándonos directamente con los directores de los hospitales. Pero debería estar más aceitado el sistema de asignación de turnos para estos casos”, afirmó.

“Es cierto que han crecido los servicios y que mucha más gente acude a los hospitales. Pero hay cosas que hay que resolver de manera urgente, como la asignación de turnos. No creo que sea algo tan difícil, y es una obligación del Estado hacerlo”, finalizó el ombudsman.