BUENOS AIRES.- El desarrollo de las negociaciones paritarias tuvo ayer nuevos cruces entre el Gobierno nacional y representantes de sindicatos opositores. Los chispazos se produjeron luego de que el Poder Ejecutivo Nacional ratificara que las discusiones son “libres” en la Argentina, mientras que los gremios afirmaron que el ministro de Economía, Axel Kicillof, intenta poner un tope a la suba salarial para que evitar que se dispare la inflación.

Hoy, las autoridades del Ministerio de Trabajo de la Nación y dirigentes sindicales de diferentes sectores retomarán las negociaciones salariales, con el fin de llegar a un porcentaje de acuerdo luego de que las discusiones se estancaran en los últimos días, como consecuencia de que varios gremios de trabajadores fijaron un límite del 27% para las subas.

En ese marco, el encargado de negar un tope por parte del Gobierno fue el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, mientras que del lado gremial salieron al cruce el jefe del sindicato de mecánicos, Ricardo Pignanelli, y el titular de Dragado y Balizamiento, Juan Carlos Smith.

Veredas diferentes

Fernández insistió ayer con que las paritarias son libres en la Argentina, aunque remarcó que es la economía la que pone un freno a las tratativas. “Si ese incremento va a impactar más allá de lo que permite la economía, y eso se va a los precios, terminás perjudicando al resto de los trabajadores. Entonces es la economía la que les pone el freno”, analizó el funcionario, en declaraciones radiales.

Consultado sobre si es el Gobierno nacional el que fija las discusiones salariales, Fernández negó esta posibilidad, e insistió con que las tratativas salariales “son libres”. “Así que no debiera haber oportunidad de que el Gobierno opine. De lo que no son libres es de la economía”, sentenció el jefe de Gabinete, quien esta semana había reclamado moderación en el desarrollo de las paritarias para que no repercutan en los precios.

En contraposición, Pignanelli abogó por acuerdos salariales en tramos cortos, de tres o cuatro meses. Además, acusó al Ministerio de Economía de limitar las paritarias. “Lo que intenta -el Ministerio de Economía- es frenar un poco los salarios para evitar que aumente la inflación. Hay sindicatos que pudieron recuperar salario, pero hay otros que no. Por eso algunos necesitan un ajuste salarial del 30% o del 32%, y otros capaz que con el 27% pueden mantener el nivel de vida”, analizó.

En la misma línea, Smith, aseveró que “hay una actitud mentirosa por parte del Gobierno nacional, cuando dice que no hay tope y que la negociación es libre”. “Hay un problema de falta de libertad en la negociación colectiva”, denunció el sindicalista, y justificó el paro general que impulsa la CGT opositora para el mes que viene. Además, Smith agregó que la combinación de inflación y de presión tributaria afecta toda la discusión salarial, porque se pierden los parámetros para negociar.

Entre las paritarias que se retomarán esta semana, figuran la de los trabajadores bancarios y la de los metalúrgicos, que fueron convocados por el Ministerio de Trabajo para intentar destrabar las negociaciones, ya que los ambos gremios convocaron a paros de actividades ante la falta de acuerdos. (DyN)