En medio de los restos de viviendas, una familia recorre lo que era el barrio de Sankhu, en las afueras de Katmandú. Diez días después del terremoto en Nepal, las posibilidades de encontrar supervivientes se han reducido al mínimo. Mientras, el número de muertos no deja de incrementarse: los últimos informes consignan que los fallecidos ascienden a 7.557 y los heridos a 14.409, la mayoría de ellos en los distritos de Sindhupalchowk, al Norte de la capital. 112 extranjeros están desaparecidos.