La intensa tormenta que se produjo anoche en la zona pedemontana de Tucumán provocó el crecimiento intempestivo del río Lules, ciudad homónima a la que no se puede acceder por la ruta 301 debido a la caída del puente. Este paso es el más utilizado para unir a ese municipio con San Miguel de Tucumán, por lo que esto genera numerosos inconvenientes para quienes trabajan o estudian en esta capital.

Juan Bertolini, jefe de los Bomberos Voluntarios de esa ciudad, informó que la caída de parte del paso se produjo alrededor de las 2.30 y por el avance de las aguas del río debieron ser evacuadas 20 familias del barrio "2 de Abril". 

Desde la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) se informó que a raíz del daño del puente, alrededor de 400 familias se encuentran sin el servicio. Las zonas más afectadas son los barrios Colonia 2, Malvinas y Finca Chica. La fuerza de las aguas también destruyó el viejo puente ferroviario, conocido como el "puente negro", cuyos pilares cedieron.   

"Nunca pasó algo así, esto es grave". Con estas palabras describió la situación el intendente luleño Julio César Dip, quien detalló que el caudal del río es el más importante desde que se inició el período de lluvias, en diciembre.

Informó que las cerca de 100 personas que fueron evacuadas serán trasladadas a una escuela, en donde recibirán asistencia municipal y de organismo de la Provincia. Explicó que entre las urgencias se buscará garantizar en las próximas horas el agua potable a las familias que se quedaron sin el servicio. Indicó que por los puentes caídos pasaban cañerías de la SAT.  

Según Dip, esta mañana a primera hora recibió una llamada del gobernador José Alperovich, para interiorizarse de la situacióny ponerse a su disposición.