Iban 10 minutos del partido cuando, sobre la línea lateral derecha, el tucumano Sebastián Palacios pisó la pelota y, de espaldas, le tiró un caño a Fabián Noguera, que sólo pudo detenerlo con una falta, unos metros más adelante. Parecía demasiado lujo del delantero de Arsenal, que luego de hacer las inferiores en Boca busca su espacio en Primera. Pero el ex Unión tenía más y a los 13 del segundo tiempo anotó el 1-0 con el que su equipo derrotaría a Banfield y se metería en la lucha por los primeros puestos del Torneo de Transición. Casi nada.