Los tucumanos ya incorporamos la cultura de no fumar en los espacios públicos cerrados. Esto se logró con la aplicación de la ley provincial de lucha antitabáquica N° 7.575, que hace siete años rige en la provincia. “Pero la norma es ahora más exigente porque fueron actualizados algunos artículos para que tenga concordancia con la ley nacional y le añadimos otros, como la prohibición de la venta de cigarrillos a menores de 18 años, y la orden de no fumar en los salones de fiestas privadas. En estas salas trabajan mozos y demás personal cuya salud debemos preservar”, señaló la neumonóloga tucumana, Ana María Stok. Otro punto que se reformó es el de las multas. “Nosotros teníamos multas en pesos para los dueños de bares o espacios públicos que violen la ley antitabáquica. Ahora, por la inflación, el valor de las multas serán el equivalente a litros de nafta, y el órgano de contralor seguirá siendo el IPLA,” detalló la médica. La reforma a la ley se hizo por iniciativa de la legisladora Beatriz Avila, presidenta de la Comisión de Salud.
La doctora Stok recordó que cuatro años antes de que entre en vigencia la ley hicieron un estudio en más de 2.000 chicos de escuelas primarias. Sedemostró que el 15% de los niños de 8 a 12 años eran fumadores. Cinco años después de implementarse la ley se repitió el estudio en los mismos establecimientos, con un resultado halagüeño: el número de fumadores en ese grupo etario bajó al 4%. “Así demostramos lo importante que es frenar el inicio en el hábito de fumar y lo positiva que resultó la ley de ambientes libres de tabaco, sobre todo para disminuir el consumo. ¡Era una barbaridad! Teníamos chicos de apenas 8 años que estaban fumando...”,expresó Stok. Los estudios fueron realizados por neumonólogos del Centro de Salud y del Instituto de Investigaciones en Patologías Respiratorias.