Alrededor de 7.500 policías, la implementación del sistema de emergencias “911”, la compra de autos y motos para que patrullen las calles, las reformas edilicias en las comisarías y la incorporación del Sistema Sibios para análisis de huellas dactilares. Todo eso, en 2013, le costó a cada tucumano $ 883, según un informe realizado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf).

La inversión en seguridad que realizan las provincias creció desde 2008, de acuerdo con el relevamiento publicado por el Iaraf, que tomó como base para el informe los datos publicados por la Dirección Nacional de Coordinación Fiscal con las Provincias del Ministerio de Economía de la Nación.

En Tucumán, el gasto en seguridad fue creciendo desde 2008 a una tasa promedio del 17,9%. En ese año se destinaron $ 312 millones a esta área (219 per cápita), y durante 2013 la inversión fue de $1.369 millones.

“Durante 2013 las 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires gastaron en conjunto $ 43.327 millones en política de seguridad, lo que equivale al 1,63% del PBI nacional”, se consigna en el informe. En 2008, el impacto del dinero destinado a la seguridad era del 1,18% del PBI. Esto significa que en estos seis años, las provincias gastan un 37,85% más en esta materia.

Cada vez más violentos
Pese a esta mayor inversión, los delitos no han disminuido. El “Índice de Victimización” que elabora el Laboratorio de Investigaciones sobre Crimen, Instituciones y Políticas de la Universidad Torcuato Di Tella, da cuenta de que durante el año pasado el 36,4% de los hogares de Argentina tiene un integrante que fue víctima de al menos un delito. En marzo de 2008, este índice era del 27,8%.

Sin embargo, en la línea de tiempo del “Índice de Victimización” se observa que se mantiene en un 36% desde mediados de 2012.

El relevamiento es realizado en 40 centros urbanos. De cada 100 hogares, 16 sufrieron al menos un delito contra la propiedad sin violencia (hurto de objetos personales, robo de vivienda, vehículos o vandalismo, sin contacto presencial entre la víctima y el delincuente).

Realizando una proyección, se observa que los delitos contra la propiedad han disminuido levemente, ya que en marzo de 2008 representaban un 17,3%. En cambio, se duplicaron los llamados delitos contra las personas, que comprenden los robos con violencia, lesiones o amenazas, corrupción, ofensa sexual, secuestro, homicidio y estafa. En 2013, de cada 100 hogares, 27 sufrieron al menos uno de estos hechos, cuando hace cinco años esta tasa era del 13%.

Inversión integral
“En Argentina, los ministerios de Seguridad son relativamente nuevos, se comenzaron a crear hace unos 10 años”, explicó el secretario de Seguridad Ciudadana de Tucumán, Paul Hofer.

El funcionario dijo que hasta hace unos años se entendía que el delito se solucionaba sólo desde la Policía, del Poder Judicial y de los servicios penitenciarios.

“Hoy está claro que el tema de la seguridad se soluciona desde un abordaje interdisciplinar, y tienen que trabajar en forma conjunta varios ministerios”, dijo Hofer. “La inversión tiene que ir de la mano con otras acciones públicas que no son necesariamente operativas. En Tucumán desde hace un tiempo comenzamos a reunirnos con otras áreas, e incluso con la Justicia. El Estado tiene que caer con toda su estructura en las causas generadoras del delito y la violencia”, manifestó el funcionario.