Por alrededor de 10 horas el tránsito se tornó un caos en las calles debido a una protesta de la Asociación de Trabajadores Involucrados en la Actividad Taximetrera (Atiat). Los choferes, que comenzaron su manifestación en la zona del parque 9 de Julio, se trasladaron a los alrededores de la plaza Independencia cerca del mediodía y se quedaron ahí hasta la tarde. Finalmente, levantaron la medida de fuerza tras acordar una reunión para el jueves o el viernes con el Gobierno.

Los taxistas se manifestaron contra los taxis truchos, la falta de transparencia y la inseguridad. A favor del incremento de la tarifa, de la provisión de combustibles a precio diferencial y de la regularización del servicio.

En noviembre pasado, este sector y el Sindicato de Peones de Taxis habían solicitado de manera formal que el valor inicial del viaje pase a costar $ 6, y la ficha $ 0,50, como piso. Actualmente, la tarifa del servicio es de $ 4,50 y la ficha que corre cada 100 metros es de $ 0,38. La Asociación de Conductores de Taxis (Acott) también había presentado una nota requiriendo una suba a la comisión de Transporte del Concejo Deliberante de la Capital.

La Acott había planteado que la bajada de bandera sea elevada de los $ 4,50 actuales a $ 8, y que la ficha suba de $ 0,38 a $ 0,55 centavos. Los gremios unificaron el pedido en $ 6, finalmente.

Gomas quemadas y discusiones

En horas de la tarde, en la esquina de San Martín y Laprida, los taxistas empezaron a quemar gomas para seguir protestando pero la policía intentó impedírselo. Fue allí que se armó una discusión, que por suerte no pasó a mayores.

Por el momento, todo taxi que intenta entrar a plaza Independencia es obligado a parar y participar de la protesta. Llevan más de diez horas y hubo incidentes en varias esquinas con los automovilistas. La plaza está rodeada totalmente. No se irán hasta que el gobierno los reciba.