Víctor Piccione es un joven tucumano, esposo y padre de familia, que quedó impactado por el nivel de violencia que exhibieron sus propios vecinos durante los saqueos que asolaron a Tucumán en las últimas horas. Piccione, de 30 años, posee un pequeño taller de reparación de canaletas en el barrio Ejército Argentino, en el sur de la Capital, y se ofreció públicamente para colaborar de manera desinteresada con pequeños comerciantes víctimas de los saqueos. A través de su cuenta de Facebook, puso a disposición su tiempo, herramientas eléctricas (taladros, amoladoras y soldador) e incluso su vehículo para ayudar en la reparación de daños.

"Luego de los desmanes, me sorprendió ver tanta gente deseándole la muerte a los saqueadores, pero no veía a nadie haciendo nada para componer algo. Tengo un taller de reparaciones, y hoy nadie vino. Entonces, se me ocurrió poner a disposición mis herramientas, las que uso todos los días, para colobrar de alguna manera, para hacer algo", dijo Piccione a LA GACETA.

En el barrio donde Piccione tiene su taller, muchos de sus vecinos fueron responsables de los saqueos ocurridos en la zona. "He visto gente llegar con elementos de electrónica esta mañana, aún cuando se sabía que los comercios estaban cerrados por los saqueos. Muchos de los atacantes son los mismos clientes de los comercios que saquearon", subrayó. "Supongo que el que hace los desmanes no tiene conciencia del valor de lo que está dañando, de lo que hay detras de lo que se está llevando", reflexionó. "Ahora, la mayoría de los comercios del barrio fueron saqueados y no sé cómo harán para reactivarlos", apuntó.

Piccione reconoció que el barrio Ejército Argentino normalmente no es seguro y que la presencia policial en la zona siempre es mínima. "Casi nunca hay policías", remarcó.

El joven tallerista reiteró que está dispuesto a ayudar dentro de sus posibilidades. "Empuñar un arma para defender un negocio, no lo haré. Pero si puedo hacer alguna reparación, colaborar con mis herramientas, estoy dispuesto", finalizó.