BUENOS AIRES.- El kirchnerismo, a través del Frente para la Victoria (FpV) y los bloques aliados, consiguió el domingo mantenerse como primera minoría en la Cámara de Diputados y, de esa manera, asegurarse el control del cuerpo (el quórum es de 129 parlamentarios) en los dos últimos años que restan de la presidencia de Cristina Fernández.

A pesar de haber sido derrotado en los principales distritos del país (Ciudad de Buenos Aires y las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Mendoza; los de mayor peso electoral y político), con el 97,3% del total de mesas escrutadas -con esos guarismos cerró el escrutinio provisorio-, el kirchnerismo "puro" del FpV tendrá un total de 132 diputados nacionales.

Ese valor se compone con 118 diputados propios a partir del 10 de diciembre, que llegarían al total con el aporte de las fuerzas aliadas. De esta manera, el oficialismo gobernante en la Cámara Baja contará con tres más que el número necesario para asegurar el quórum para sesionar.

No obstante, la cantidad definitiva deberá verse caso por caso, ante la incógnita que representa el comportamiento de los aliados "críticos" y las disidencias expresadas por algunos integrantes del bloque del Frente para la Victoria y la posibilidad de nuevos "pases" hacia el Frente Renovador de Sergio Massa. En ese sentido, debe tenerse en cuenta que entre los 16 diputados electos de FR hay dos que se van a sumar al bloque del PRO (macrista) y que la centro-izquierda está dispersa entre los bloques de la UCR, el Partido Socialista, GEN y Proyecto Sur.

De esta manera, el bloque kirchnerista contará con los 77 diputados que tienen mandato hasta 2015, y 41 que fueron elegidos este domingo. Ahí están incluidos los del Frente Renovador para la Concordia, si bien hace algunos meses anticiparon su intención de separarse de la bancada oficialista y formar un bloque propio, que de todas maneras seguiría reportando al kirchnerismo. Cuenta como aliados permanentes a los siete del Frente Cívico por Santiago del Estero; cuatro de Nuevo Encuentro, Alicia Comelli del Movimiento Popular Neuquino (MPN), un salteño y uno del PJ La Pampa.

La oposición, en tanto, quedaría con 16 diputados del Frente Renovador de Massa; 12 del peronismo disidente y seis de Compromiso Federal. Además, el PRO sumará 16 integrantes, más sus aliados Patricia Bullrich y Roberto Pradines. Hay, además, dos diputados del MPN no oficialista.

La UCR será el bloque opositor más numeroso (40), más dos del Frente Cívico de Catamarca.

Bien cerca están los diputados de UNEN, Martín Lousteau, Victoria Donda, Alcira Argumedo, y tres de la Coalición Cívica. Hay además ocho socialistas, cuatro del GEN y dos del Frente Cívico cordobés.

Dentro de la oposición se pueden sumar a tres diputados de Unidad Popular, los tres flamantes del Frente de Izquierda, uno del Movimiento Social Patagónico y a Ramona Pucheta. No tan opositor también se suma a un diputado del Movimiento Popular Fueguino.

¿Por qué?

El aumento de diputados "K" obedeció a que las bancas que se renovaron fueron las de diputados electos en 2009, cuando el oficialismo tuvo uno de sus peores desempeños electorales.

Además del crecimiento del FpV y sus aliados, otros tres espacios tuvieron motivos para celebrar: los "renovadores" de Massa (ex kirchnerista), el PRO y el Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT).

Los massistas ampliaron su bloque con seis miembros, con lo que pasarán a ser por lo menos 19, si bien sus integrantes confían en sumar más adeptos, en especial del alicaído denarvaísmo, más "K" y peronistas provinciales.

El PRO contará con 18 integrantes con sus aliados y, en lo que representa la novedad de este espacio, es que amplió su representación más allá de la Ciudad y la provincia de Buenos Aires, con diputados electos por Santa Fe, Córdoba, La Pampa y Entre Ríos.

En lo que constituyó una de las sorpresas, la izquierda trotskista del FIT tuvo su debut legislativo nacional con sus primeros tres diputados en la historia argentina, provenientes de las provincias de Buenos Aires, Mendoza y Salta.

Paradójicamente, el espacio de centro-izquierda (Frente Progresista Cívico y Social, UNEN, UCR, Partido Socialista y otras denominaciones), tendrá dos diputados menos a partir del 10 de diciembre, a pesar de haber triunfado en distritos importantes como Santa Fe y Mendoza y ubicarse en el segundo lugar en la Ciudad de Buenos Aires. Este sector, si formaliza la unidad, podría alcanzar los 58 diputados y ser el segundo bloque de la Cámara Baja. (DyN-parlamentario.com)