A pesar de que el domingo amaneció muy frío, miles de fieles desafiaron a la temperatura en Villa Brochero y se hicieron presentes en la misa de clausura y de acción de gracia por el nuevo beato José Gabriel Brochero.

La homilia estuvo a cargo Santiago Olivera, obispo de Cruz del Eje, quién aseguró que "el cura Brochero es un ejemplo para todos los cristianos y los sacerdores".

El momento más emocionante fue cuando, después de la misa, el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, enviado por el Papa Francisco, trasladó a la multitud algunas palabras del Sumo Pontífice. "El Papa está con nosotros y durante el Angelus en Roma recordó a Brochero. Francisco camina con nosotros y espera que ahora, con la beatificación del cura Brochero aumente el fervor de todo el clero, los obispos y los cristianos de Argentina para que seamos discípulos de Cristo y misioneros del Evangelio", explicó en un trabajoso español. 

Después de una semana de celebraciones, Villa Brochero concluyó las celebraciones por la beatificación de uno de sus personalidades más populares y que tanto marcó a la comunidad cristiana de la región.