Una polémica se desató en Uruguay tras la decisión de la intendenta de Montevideo, Ana Olivera, de entregar a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner las llaves de la ciudad. 

La mandataria argentina acudirá el martes a la capital uruguaya para la inauguración de una planta desulfurizadora de la Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland (Ancap).

Desde el Partido Nacional, el diputado y precandidato a intendente montevideano Jorge Gandini afirmó al diario El País que existe un problema "de fondo y forma" con el reconocimiento: "este sea el mejor momento para dar señales de ese tipo con todos los vaivenes que ha tenido la relación con el gobierno de los Kirchner" y agregó: "Uruguay en su conjunto debe dar señales de buenas relaciones pero no ir más allá".

De hecho, el legislador publicó en su cuenta de Twitter un mensaje sumamente irónico: "Si Ana Olivera decide entregarle las llaves de la Ciudad a Cristina K... hay que cambiar la cerradura. Por las dudas...".

Por su parte, el diputado Javier García, también del Partido Nacional y candidato a intendente en 2005, disparó que "a lo largo de su mandato [Cristina Kirchner] dio pruebas suficientes de su falta de consideración y respeto al pueblo uruguayo, promoviendo medidas que dañaron y aún perjudican a nuestro país". (Lanacion.com)

Por su parte, la Presidenta se reunirá con su parte uruguayo José Mujica y su presencia se explica en que la planta de Ancap fue construída por AESA, subsidiaria de YPF