La comisión especial que revisa la reforma del Código Procesal Penal de Tucumán (CPPT) mantuvo una reunión de unas dos horas y media ayer a la tarde, en la Legislatura, para definir la metodología de trabajo del equipo. El comité, integrado por representantes de la Legislatura, del Poder Judicial, del Poder Ejecutivo y de los Colegios de Abogados de la Capital y del Sur, resolvió, como primer punto, hacer un esfuerzo por arribar a conclusiones mediante el consenso. Cuando esta chance se agote, los funcionarios y legisladores adoptarán el mecanismo de la tradicional votación. Los representantes de los tres poderes y de los letrados acordaron que, cuando se deba alzar la mano para dirimir algún punto, las posturas de la mayoría y de la minoría quedarán asentadas en el anteproyecto para que las comisiones internas del parlamento puedan echar mano a más elementos a la hora de realizar la iniciativa final. También se resolvió que el comité revisor del CPPT trabaje a puertas abiertas, salvo que una situación amerite el debate sin público. La comisión volverá a reunirse el 9 de septiembre, cuando analizarán las tareas que ya realizó sobre este tópico la Corte Suprema de Justicia de Tucumán.