BUENOS AIRES.- "En nuestro país no puede hablarse aún, seriamente, de la emancipación política de la mujer, es decir, de abolir la incapacidad que pesa sobre ella, para que haga sentir, en el voto, la fuerza de su pensamiento, si lo tiene". Eso escribía Alfonsina Storni en la Revista La Nota, año 5, número 210, el 22 de agosto de 1919 en una artículo que lleva como título 'Derechos civiles femeninos'.
Hoy se cumplen 60 años de las elecciones presidenciales de 1951, cuando por primera vez votaron las mujeres en todo el país, lo que significó la culminación de un reclamo de décadas.
Alfonsina añade: "Todas las mujeres están capacitadas para ganarse la vida y representan una fuerza considerable, merecen, cuando menos, la inteligencia de los legisladores. Votan, además, las mujeres, en casi toda Europa, y en media América. Lo que se concedería a las mujeres nuestras, es algo insignificante, comparado con los privilegios de que hoy disfrutan en casi todo el mundo civilizado".
El laborioso camino hacia el voto de las mujeres se hizo realidad el 11 de noviembre de 1951, ocasión en que Juan Domingo Perón logró la reelección, cuando votaron 3,8 millones de mujeres. Poco más del 63% del padrón femenino lo hizo por la fórmula peronista, casi el 31% por el radicalismo. El justicialismo fue el único de ambos que llevó mujeres en sus listas. Por ese motivo, a partir de 1952 asumieron en sus bancas 23 diputadas y seis senadoras por el oficialismo.
La lucha política y social por el voto femenino y otros derechos civiles se venía registrando desde principios del siglo XX y para ellos se habían creado varias organizaciones de mujeres, algunas de ellas de orientación socialista.
Por ejemplo, Alfonsina Storni participaba en una entidad que se llamaba Asociación Pro Derechos de la Mujer, aunque los proyectos que se presentaban en el Congreso jamás eran tratados u otros quedaron truncos como los ingresados durante el último gobierno democrático del radical Hipólito Yrigoyen a raíz del golpe de 1930.
Así fue como el 9 de septiembre de 1947 se sancionó la ley 13.010, que se promulgó el 23 de ese mismo mes. El artículo primero de esa norma señala: "Las mujeres argentinas tendrán los mismos derechos políticos y estarán sujetas a las mismas obligaciones que les acuerdan o imponen las leyes a los varones argentinos".
Hoy se cumplen 60 años de las elecciones presidenciales de 1951, cuando por primera vez votaron las mujeres en todo el país, lo que significó la culminación de un reclamo de décadas.
Alfonsina añade: "Todas las mujeres están capacitadas para ganarse la vida y representan una fuerza considerable, merecen, cuando menos, la inteligencia de los legisladores. Votan, además, las mujeres, en casi toda Europa, y en media América. Lo que se concedería a las mujeres nuestras, es algo insignificante, comparado con los privilegios de que hoy disfrutan en casi todo el mundo civilizado".
El laborioso camino hacia el voto de las mujeres se hizo realidad el 11 de noviembre de 1951, ocasión en que Juan Domingo Perón logró la reelección, cuando votaron 3,8 millones de mujeres. Poco más del 63% del padrón femenino lo hizo por la fórmula peronista, casi el 31% por el radicalismo. El justicialismo fue el único de ambos que llevó mujeres en sus listas. Por ese motivo, a partir de 1952 asumieron en sus bancas 23 diputadas y seis senadoras por el oficialismo.
La lucha política y social por el voto femenino y otros derechos civiles se venía registrando desde principios del siglo XX y para ellos se habían creado varias organizaciones de mujeres, algunas de ellas de orientación socialista.
Por ejemplo, Alfonsina Storni participaba en una entidad que se llamaba Asociación Pro Derechos de la Mujer, aunque los proyectos que se presentaban en el Congreso jamás eran tratados u otros quedaron truncos como los ingresados durante el último gobierno democrático del radical Hipólito Yrigoyen a raíz del golpe de 1930.
Así fue como el 9 de septiembre de 1947 se sancionó la ley 13.010, que se promulgó el 23 de ese mismo mes. El artículo primero de esa norma señala: "Las mujeres argentinas tendrán los mismos derechos políticos y estarán sujetas a las mismas obligaciones que les acuerdan o imponen las leyes a los varones argentinos".