La intervención de los estados para tratar de aliviar la crisis de 2008 sólo empeoró la situación. La debacle mundial ya tocó Tucumán. Las políticas del Gobierno nacional no serán efectivas para proteger a la clase trabajadora. Esos fueron algunos de los conceptos que expuso ayer la economista Paula Bach en Tucumán. La integrante del Instituto del Pensamiento Socialista "Karl Marx" disertó en el marco de las Jornadas Marxismo NOA 2011, organizadas por el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS).

"Los Estados tomaron medidas de intervención muy fuertes sobre la economía en 2010, que llevaron a una relativa solución aparente. Entonces, muchos dijeron que se había terminado la crisis, pero hoy vemos que no. La intervención empeoró la situación, porque en realidad la crisis no tenía una salida capitalista posible", explicó en su charla denominada "Perspectivas de la crisis económica mundial".

La especialista detalló que se salvaron parte de las deudas de los bancos pero que con ello no se impidió que vuelvan a explotar. "La situación se complica con enormes deudas estatales que se suman a las privadas y a las interbancarias. Estamos ante un fenómeno de deudas combinadas con altas posibilidades de estallar, que a su vez, se combina con procesos recesivos en Europa y Estados Unidos, lo que repercute en América Latina", aseveró. Según especificó, la suspensión de las actividades en la fábrica Alpargatas en nuestra provincia y de Fiat, en Córdoba, son golpes de la crisis.

Bach cuestionó la política económica del Gobierno nacional al entender que implicará la rebaja de los salarios, la reducción de los subsidios y el volver a obtener endeudamiento externo. "Esto sólo provocará mayores penurias a los trabajadores", advirtió.