Las Bolsas europeas cerraron ayer a la baja por tercera sesión consecutiva, arrastradas por los decepcionantes resultados como los de Credit Suisse, Diageo y Air France-KLM. Sin embargo, la noticia de que podría dimitir el presidente de Egipto, Hosni Mubarak -finalmente, anunció su continuidad-, ayudó a elevar los precios del petróleo y a que las acciones del sector energético subieran un 0,23%, lo que limitó las pérdidas en el índice paneuropeo FTSEurofirst 300.

El índice de referencia de las principales Bolsas europeas cerró con una caída del 0,18% hasta los 1.169,31 puntos. El lunes tocó un máximo de 29 meses y desde entonces cayó por tres sesiones consecutivas, aunque todavía acumula una ganancia del 4,2% en lo que va del año.

Entre tanto, la Bolsa porteña sufrió una fuerte caída del 2,61%, en una rueda con pocos negocios, la Bolsa porteña resultó golpeada por las ventas de inversores que desarmaron posiciones en mercados de riesgo.

En Wall Street, el Dow Jones cerró con un leve descenso de 0,09%; mientras tanto, el Standard & Poor`s 500 avanzó 0,07%, y el Nasdaq Composite registró una leve alza de 0,05%, según la agencia Bloomberg.

"La noticia sobre Mubarak es como un pequeño eco, pero estamos en una fase prolongada de corrección del mercado. Podríamos ver una mayor debilidad", dijo Jawaid Afsar, operador de Securequity.