La presencia de más de 20 barrabravas en el mismo avión en el que la Selección viajó a Sudáfrica no pudo deberse a una casualidad. Sin embargo, nadie se hace cargo de semejante compañía, como si se tratara de fantasmas. Por eso, la polémica crece con el correr de las horas. ¿Qué opinás al respecto? Dejá aquí tu comentario. Una selección de los mejores mensajes puede después ser publicada en el diario impreso. LA GACETA ©