El conflicto institucional que atraviesa San Lorenzo sumó este miércoles un nuevo capítulo. En la previa del duelo frente a Sarmiento de Junín, los jugadores del plantel profesional publicaron un comunicado conjunto en el que denunciaron el deterioro de sus condiciones laborales y exigieron una solución inmediata. “La situación actual es insostenible”, expresaron en un mensaje replicado por todo el grupo en redes sociales.

Los futbolistas revelaron que en algunos casos no cobran sus haberes desde agosto y que el retraso impacta directamente en el día a día de sus familias. “Desde el mes de agosto no hemos percibido, en algunos casos, íntegramente nuestros salarios, lo que afecta directamente a nuestras familias y compromete el normal desarrollo de nuestra actividad profesional”, señala el texto difundido por el capitán Gastón Hernández.

A la falta de pagos se suman otras carencias básicas que, según denunciaron, padecen desde hace meses. “A ello se suman otras dificultades que padecemos a diario: la falta de comida adecuada, la ausencia de servicios básicos en el vestuario (agua caliente), y la falta de respuestas concretas por parte de la dirigencia, a pesar de las reiteradas promesas de solución que nunca se cumplieron”, explicaron los jugadores.

En el comunicado, el grupo remarcó que eligieron mantener la calma y continuar compitiendo pese a las dificultades, pero que el límite se alcanzó. “Durante todo este tiempo hemos sido pacientes, responsables y respetuosos. Continuamos entrenando, compitiendo y representando al club con el mayor compromiso posible, priorizando siempre los colores, la institución y su gente. Sin embargo, sentimos que ha llegado el momento de alzar la voz nuevamente”, sostuvieron.

Antes de cerrar, el mensaje apeló directamente a la conducción del club. “Esperamos que las autoridades actúen con la responsabilidad que el momento exige. No se trata solo de una cuestión económica, sino también de respeto, dignidad y condiciones laborales mínimas que todo trabajador merece”.

La publicación llega en uno de los momentos más críticos de la historia reciente de San Lorenzo. Desde el escándalo que involucró al presidente Marcelo Moretti, acusado de recibir una coima, la crisis institucional se profundizó y el club atraviesa una situación económica límite. A pesar de los buenos resultados deportivos, ya clasificado a los playoffs del Torneo Clausura y con chances de ingresar a la Copa Sudamericana, el clima interno está cada vez más tenso.

Por ahora, el plantel no anunció medidas de fuerza, pero el reclamo público expone la fractura total entre los jugadores y la dirigencia azulgrana.