Las bananas son una de las frutas más consumidas del mundo, pero también una de las que más rápido se echan a perder. Apenas cambian de color o se ablandan, muchos las descartan sin saber que existe un truco casero tan simple como eficaz para conservarlas frescas por más tiempo. Solo se necesita un elemento que todos tenemos en casa: papel film.

Bizcochuelo de banana saludable: sin harinas, sin gluten y listo en cinco minutos

Aunque a simple vista parezca un gesto sin importancia, cubrir los extremos del racimo puede marcar una gran diferencia. Este pequeño paso, que se volvió viral entre quienes buscan aprovechar mejor los alimentos, tiene una explicación científica y sorprendente que revela por qué funciona tan bien.

¿Para qué sirve cubrir los tallos de las bananas con film?

El objetivo de este método es simple: retrasar la maduración de las bananas. En la parte superior del racimo —el punto donde se unen— se libera etileno, un gas natural que acelera el proceso de maduración en las frutas.

Al envolver esa zona con papel film, se consigue retener parte del etileno y evitar que se propague con facilidad, permitiendo que las bananas conserven su color y frescura por más tiempo. Cuando llegás del supermercado o la verdulería, basta con cubrir bien la parte superior con una pequeña porción de film.

Los cuatro beneficios del truco del papel film

- Las bananas mantienen su color amarillo por más tiempo.

- Disminuye la aparición de manchas negras en la cáscara.

- Retrasa el ablandamiento de la fruta, especialmente en días calurosos.

- Es una solución práctica si comprás muchas bananas de una vez.

Banana papel filme: algunas precauciones para tener en cuenta

Aunque este método puede ser útil, no es perfecto. Conviene tener en cuenta algunos detalles:

- Si las bananas ya están maduras, el film no detendrá el proceso.

- Envolver cada banana por separado puede ser tedioso y poco ecológico, ya que aumenta el uso de plástico.

- Si el film no está bien ajustado, puede acumular humedad y favorecer la aparición de moho o hongos en el tallo.

Una buena alternativa es usar una envoltura reutilizable, como papel encerado ecológico o tela encerada, que cumplen la misma función sin generar residuos plásticos.