Entre mayo y agosto de 1945 el servicio de ómnibus en San Miguel de Tucumán atravesó una tremenda crisis. La crónica del 17 de junio informaba que a pesar del aumento del precio del pasaje de 10 centavos a 15 centavos “los vecinos seguían soportando prolongadas esperas y los inconvenientes que significaba viajar con los ómnibus desbordantes de pasajeros”. El comisionado municipal, René Lawson, advirtió a las empresas que se vencería el plazo de 90 días otorgado en mayo para mejorar los servicios o se iba a dejar sin efecto la suba del pasaje. Debían además, proporcionar planillas de recaudación e inversión diarias.

Pero continuaba la escasez de neumáticos, a causa de la Segunda Guerra Mundial, que estaba terminando. La mitad de los colectivos no tenía neumáticos y se esperaba que llegasen partidas desde Brasil en dos meses más.

Recuerdos fotográficos: 1945. La crisis del servicio de ómnibus urbanos

Para colmo, el 10 de junio se produjo el cambio de mano en el sentido del tránsito, que hasta entonces era a la izquierda como en los países de la comunidad inglesa. En todo el territorio argentino se pasó a circular por la derecha, pero las concesionarias de ómnibus, a pesar de haber sido advertidas desde ocho meses antes de que debían cambiar las puertas, que estaban a la izquierda, y llevarlas al lado derecho para que los pasajeros no subieran ni bajaran en medio de la calle, no lo hicieron. Pasado un plazo prudencial, las autoridades les clausuraron las puertas delanteras, tal como se refleja en la publicación del 17 de junio de 1945. La gente se vio obligada a subir y bajar del ómnibus por la puerta trasera.