En medio de la tensión financiera y la volatilidad cambiaria, la Argentina avanza en una negociación clave: un swap de monedas con Estados Unidos, por un monto de US$20.000 millones, según confirmó el secretario del Tesoro norteamericano, Scott Bessent.
La medida busca reforzar las reservas del Banco Central (BCRA) y dar un mensaje de estabilidad a los mercados, en momentos en que la presión sobre el dólar se intensifica.
¿Qué es un swap de monedas?
Un swap de monedas es un acuerdo entre dos países que permite intercambiar divisas. En la práctica, funciona como un préstamo en especie: cada banco central entrega su moneda y recibe la del otro.
En este caso, la Argentina recibiría dólares del Tesoro estadounidense, a cambio de pesos. Si el país necesita usarlos, debe activar el swap o un tramo del mismo. Una vez finalizado el plazo, debe devolver el monto recibido más los intereses correspondientes.
Este mecanismo sirve para:
Fortalecer las reservas internacionales.
Dar respaldo cambiario frente a episodios de volatilidad.
Facilitar el comercio bilateral entre los países involucrados.
¿En qué se diferencia de un préstamo tradicional?
Un crédito clásico es un financiamiento en el que un país recibe dinero de un organismo, banco o país, y se compromete a devolverlo en un plazo determinado con intereses. Generalmente, este tipo de préstamos incluyen condiciones económicas o políticas.
El swap de monedas, en cambio:
No genera deuda en el sentido estricto, porque no implica un desembolso libre de dinero.
Tiene menos condiciones externas que un préstamo del FMI o de bancos privados.
Suele usarse solo como respaldo, no para financiar gasto público ni cancelar deudas.
En resumen, mientras un crédito otorga dólares líquidos para diversos usos, el swap funciona como un “seguro” de divisas que refuerza la confianza y las reservas del país.
Argentina entre China y Estados Unidos
La Argentina mantiene desde 2009 un swap con China, renovado varias veces, que le permite contabilizar parte de sus reservas en yuanes. Este acuerdo seguirá vigente hasta 2026.
Ahora, el Gobierno de Javier Milei busca replicar el modelo con Estados Unidos. El objetivo: enviar una señal de respaldo financiero en plena campaña y en un escenario de fragilidad económica.
¿Qué impacto tendría en la economía argentina?
El swap con Estados Unidos no significa que ingresen dólares de libre disponibilidad. Su verdadero valor está en la confianza que pueda transmitir a los mercados.
Si los inversores perciben que el país tiene más respaldo cambiario, puede:
Reducirse la presión sobre el dólar paralelo.
Mejorar la cotización de bonos y acciones.
Bajar el riesgo país.
Sin embargo, todo dependerá de las condiciones finales del acuerdo y de si esos fondos estarán efectivamente disponibles para su uso.