Cris Morena reapareció públicamente por primera vez tras la muerte de su nieta, Mila Yankelevich, en un trágico accidente. El encuentro fue la semana pasada, durante uno de los conciertos de Erreway, la banda que marcó a toda una generación.

En diálogo con el stream Otro Mundo, la creadora y productora reveló cómo vivió ese regreso a los escenarios después de la pérdida familiar.

“Quería acompañar a los chicos de Erreway. Me costó un poco la decisión, pero no por ellos sino porque era enfrentar todo un estadio lleno, maravilloso, en el que estuvimos en febrero. Lo que me pasó este año fue insólito, no puedo creer Arena de Buenos Aires, Tecnópolis, una cosa de locos. Me parece que pasaron siete años, y en realidad pasaron dos mil años, ¿entendés?”, confesó con emoción.

Respecto a su primera aparición pública tras la tragedia, Cris reconoció: “Fue muy emotivo. Fue una decisión difícil porque era la primera vez después de lo que nos sucedió con mi nieta Mila, que yo aparecía en público”.

El pedido especial

La productora también contó cuál fue la única condición que puso para estar presente: “Lo único que les pedí, por favor, es que no estaba para hacer notas ni para hablar de otra cosa que no fuera la rebeldía. Para mí, la rebeldía es un buen motivo para vivir”.

Y explicó su mirada: “No digo vivir en rebeldía porque seríamos un poco caprichosos. Digo la rebeldía como acto de vida. No es lo que el mundo me impone: yo también tengo mi propio mundo adentro y quiero esto y voy por esto. No es una guerra, no es pelearme con alguien, es tener esa actitud de decir: ‘Tengo cierta rebeldía y me parece un buen adjetivo’. Tengo el corazón rojo, al fuego vivo. Y tengo un montón de proyectos”.

Al igual que ocurrió tras la pérdida de su hija Romina Yan, Cris Morena confesó que, a pesar de la tristeza, el dolor volvió a transformarse en inspiración: “Exploté de proyectos en esta última semana cuando debería ser una semana normalmente, quizá muy triste todavía. Bueno, no sé qué me pasó. La tristeza se transformó en proyectos. El corazón se me puso abierto, total. Y tenemos un montón de proyectos para OM (Otro Mundo), para nosotros, para la vida. Nuevas cosas para hacer, pero muy importantes”.