Aunque muchas familias eligen a los perros de raza por su apariencia o temperamento, la ciencia advierte que los caninos puros enfrentan mayores riesgos de salud que los mestizos. El motivo principal es la cría selectiva, un proceso que durante décadas priorizó características físicas específicas por encima del bienestar integral de los animales.
La Dra. Ana López, especialista en genética y etología de la Universidad de Buenos Aires (UBA), explicó que “la selección de rasgos particulares reduce la diversidad genética. Los cruces entre individuos emparentados aumentan la probabilidad de transmitir mutaciones recesivas responsables de trastornos de salud”. Este fenómeno, conocido como depresión endogámica, debilita el sistema inmunológico y favorece la aparición de múltiples enfermedades.
Vigor híbrido: la ventaja de los mestizos
A diferencia de los perros de raza, los mestizos cuentan con una ventaja biológica: el “vigor híbrido”. Su mayor diversidad genética actúa como un escudo natural que diluye la expresión de genes defectuosos y fortalece la respuesta inmunológica.
En los animales de raza pura, en cambio, el pool genético limitado los hace más vulnerables a enfermedades hereditarias. Este efecto se observa con claridad en algunas de las razas más populares:
Bulldog Francés: su estructura facial achatada provoca graves problemas respiratorios. La estenosis de narinas y el paladar blando elongado dificultan su respiración, los expone a golpes de calor y reduce su esperanza de vida.
Dogo Argentino: hereda de sus ancestros (Bulldog Inglés y Gran Danés Arlequín) la predisposición a la sordera congénita. También es propenso a displasia de cadera y torsión gástrica, una emergencia quirúrgica de alta mortalidad.
Pastor Alemán y Labrador Retriever: sufren con frecuencia displasia de cadera y de codo, debido a su morfología y tamaño.
Cocker Spaniel Inglés: presenta tendencia a infecciones óticas y alergias cutáneas.
Dálmata: además de su alta incidencia de sordera congénita, su metabolismo particular del ácido úrico favorece la aparición de cálculos urinarios.
Una advertencia internacional
La Federación de Veterinarios Europeos ya había alertado en 2022 sobre los problemas de bienestar que genera la cría extrema en busca de rasgos morfológicos exagerados, un fenómeno que afecta a la mayoría de las razas puras y que hoy preocupa a los especialistas en salud animal.
En definitiva, mientras los perros mestizos parecen más resistentes gracias a su diversidad genética, los de raza cargan con una herencia compleja producto de la búsqueda de “perfección estética”. Una realidad que invita a reflexionar sobre la importancia de priorizar la salud y el bienestar animal por encima de los estándares de belleza impuestos por la cría selectiva.