El cantante mallorquín Jaume Anglada, íntimo amigo del rey Felipe VI, continúa hospitalizado en estado grave tras el brutal accidente que sufrió el pasado 8 de junio, cuando fue arrollado por un vehículo cuyo conductor se dio a la fuga.
Este miércoles 13 de agosto, el artista fue intervenido quirúrgicamente de la cadera en el Hospital de Son Espases (Mallorca). Según informó el diario Última Hora, los médicos le colocaron placas en la pelvis y recolocaron la cabeza del fémur. La operación fue favorable, pero su recuperación será larga y requerirá nuevas cirugías en la misma zona y en la mandíbula.
Estado de salud: grave pero estable
Fuentes médicas han confirmado que Anglada permanece en la UCI en coma inducido y presenta fracturas en la cadera, mandíbula y costillas, además de la extirpación del bazo, lo que complica su evolución. El ingreso se prevé prolongado.
Su esposa, Pilar Aguiló, no se ha separado de su lado desde el accidente, mientras familiares y amigos piden respeto y discreción. Entre quienes siguen de cerca su estado se encuentran los reyes Felipe VI y Letizia, quienes han contactado con su familia y planean visitarlo cuando su salud lo permita.
Apoyo de amigos y de la Casa Real
El periodista Julián Aguirre explicó en Y ahora Sonsoles (Antena 3) que los médicos están despertando poco a poco a Anglada, haciéndole preguntas básicas para evaluar su respuesta neurológica, aunque por ahora “no siempre contesta de forma acertada”.
El monarca y la reina, que recientemente coincidieron con el cantante en las regatas de Mallorca, han mostrado su preocupación y apoyo constante.
El accidente y el conductor detenido
El responsable del atropello es un joven de 20 años que conducía bajo los efectos del alcohol y realizó una maniobra prohibida. Fue detenido poco después gracias a que varios testigos anotaron su matrícula.
Actualmente se encuentra en prisión provisional y está imputado por tres delitos: conducción bajo los efectos del alcohol, abandono del lugar del accidente y lesiones imprudentes. Su abogado aseguró que está “muy arrepentido” y “abatido”.