Un nuevo conflicto sacude al espectáculo chileno. Esta vez, las protagonistas son Francisca Merino e Íngrid Cruz, quienes reavivaron una antigua disputa ocurrida durante las grabaciones de la teleserie Marparaíso, a fines de los años 90.

Todo comenzó cuando Íngrid Cruz participó en el podcast Di la verdad Rosa, conducido por Yuly, donde recordó un episodio de maltrato que vivió en sus inicios en televisión. “Me tiraba la ropa, me pisoteaba las cosas, me trataba de ‘rota’. Fue súper duro”, relató sobre su experiencia con Francisca Merino. Aunque reconoció que con el tiempo recibió una disculpa, su testimonio generó un fuerte revuelo en redes y medios.

La respuesta de Merino no tardó en llegar. En el programa Qué te lo Digo de Zona Latina, entregó su versión y reveló que el conflicto con Cruz iba mucho más allá del set de grabación. “Ella saca una pelea que tuve hace más de 30 años. Te voy a contar que yo pololeaba con Luciano (Cruz-Coke) y ella se lo tiraba, se lo agarraba y trabajaba conmigo. Se agarraba a mi pololo y era compañera mía de elenco”, aseguró.

Fuerte cruce en ¡Hay que decirlo!: Pamela Díaz arremete contra Luis Mateucci por Daniela Aránguiz

Según Merino, fue el guionista Pablo Illanes quien le advirtió de la infidelidad. “Obviamente la encaré, la habré insultado, no me acuerdo si la ‘rotié’”, confesó. Además, expresó su decepción por el silencio de su círculo cercano en ese entonces: “Si yo tengo una amiga y sé que el tipo la está gorreando y me quedo callada...”.

La respuesta de Pancha Merino en Primer Plano 

Este fin de semana, la actriz fue invitada al programa Primer Plano, donde profundizó en sus sentimientos respecto a las acusaciones. “A mí me duele que me digan que soy maltratadora. Porque yo lucho, a diario, contra el maltrato”, afirmó con emoción.

Merino también reflexionó sobre su carácter impulsivo: “Cuando me enojo, sé que digo lo que nadie puede decir. Sé que voy a quedar mal, sé que me van a echar, pero prefiero decirlo. Entré a estudiar Teatro para expresar mi libertad”, señaló. 

Consultada sobre por qué descargó su enojo contra Cruz y no contra su entonces pareja, fue autocrítica: “Las mujeres caemos en enemistarnos con la mujer... Fue porque tenía 23 años y la agarré con la hue... no más”.

Finalmente, la actriz bajó el tono de sus declaraciones y llamó a mirar el pasado con otra perspectiva. “Estamos viejas, hemos sufrido dolores irremediables, estafas, pérdidas”, concluyó, dejando abierta la posibilidad de una futura reconciliación.