Las bajas temperaturas que vienen de la mano del invierno convierten cada movimiento en un reto, incluso la limpieza del hogar, aunque en especial del piso, que puede demandar mucho tiempo para secarse. La ausencia de corrientes de aire juega en contra, pero con un truco casero podrás dejar tus espacios limpios, brillantes y secos en cuestión de minutos.
Este método, recomendado por expertos en limpieza, se basa en modificar la forma tradicional de trapear, evitando recurrir a productos costosos y a herramientas especiales. En lugar de utilizar solo agua, se sugiere preparar una solución compuesta por partes iguales de agua tibia y alcohol. Este último componente acelera notablemente el proceso de evaporación gracias a su naturaleza volátil, lo que permite que el piso se seque mucho más rápido incluso en ambientes fríos.
Además, el alcohol tiene propiedades desinfectantes, por lo que no solo colabora con la limpieza superficial, sino que también elimina gérmenes y bacterias. Para potenciar el efecto limpiador, se puede agregar una pequeña cantidad de detergente o algunas gotas de vinagre blanco, lo que mejora la remoción de grasa y suciedad acumulada.
La clave está en escurrir bien el trapo antes de aplicarlo sobre el piso. El exceso de líquido no solo retrasa el secado, sino que también puede dañar ciertas superficies. Con este truco casero, se logra un equilibrio ideal entre limpieza y practicidad, sin dejar manchas ni marcas.
Uno de los aspectos más valorados de este método es su compatibilidad con distintos tipos de superficies. Especialistas en mantenimiento del hogar indican que la mezcla de agua y alcohol no representa un riesgo para pisos delicados, como los de parquet o flotantes, siempre que se evite saturar la superficie. Esto lo convierte en una alternativa segura y eficaz para aplicar en cualquier ambiente de la casa durante el invierno.