A menos de dos semanas la baja temporal de las retenciones llegará a su fin. El Gobierno nacional no ha dado señales de que prorrogará la medida o modificará los derechos a las exportaciones tal como lo vienen solicitando las entidades que representan a los productores del campo. Así, desde julio, los derechos de exportación volverán al 33% para la soja y 12% para el caso del maíz. Mientras tanto, los productores del norte señalan que la Casa Rosada debería pensar en un esquema particular o una prórroga de al menos 60 días para la zona NOA, ya que hacia fines de mes arranca la cosecha gruesa y, con la decisión oficial, se dispararían más los costos.

El presidente de la Sociedad Rural de Tucumán, José Frías Silva (h), ratificó el planteo que hoy será puesto nuevamente en la mesa de debate de la Mesa de Enlace del NOA, con el fin de adoptar una postura antes de la finalización de la baja temporal de las retenciones. Los hombres del agro insisten en que esa medida es distorsiva, ya que castiga a la producción y debilita el desarrollo de las economías regionales. En mayo, las entidades de esta parte del país habían expresado su rechazo a la vigencia de los derechos de exportación resulta insostenible en un contexto en el que, además no baja la presión impositiva, como tampoco mejoran los precios internacionales. Los ruralistas aguardan señales del Gobierno nacional en torno de las notas presentadas a las autoridades nacionales y al propio ministro de Economía, Luis Caputo, cuando vino a Tucumán, el 30 de mayo pasado, invitado por la Fundación Federalismo y Libertad.

En tanto, la Asociación Civil de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor) elevó su reclamo al gobierno del presidente Javier Milei para la eliminación de los derechos de exportación (retenciones), especialmente para la zona norte del país.

Apronor elevó el reclamo por retenciones: "¡Una muerte anunciada!" para el norte argentino

La entidad argumentó que la región se encuentra en una situación de total desventaja, en comparación con otras áreas geográficas del país, debido a sus diferentes rendimientos y los altos costos de flete para cultivos como la soja y el maíz.

Apronor advirtió que el próximo 30 de junio vencerá la baja transitoria y parcial de los derechos de exportación, establecida en el decreto 38/20252. La asociación considera que mantener el esquema anterior se aparta del “camino virtuoso” iniciado, más aún en un contexto de precios internacionales bajos y un aumento de costos en dólares, parámetros que no han variado desde la implementación de dicho decreto.

En un comunicado de prensa, la entidad local calificó la situación de “¡Una muerte anunciada!”. Según Apronor, la producción de granos en el norte del país es inviable con la actual carga impositiva, principalmente debido a los Derechos de Exportación. La entidad sostuvo que este sistema de cobro de impuestos a los productores de bienes exportables, quienes generan el ingreso de divisas al país, está provocando el quebranto y la desaparición de productores agropecuarios. Esto, a su vez, genera un “éxodo de las poblaciones rurales del NOA y NEA”.

La Asociación denunció que durante más de dos décadas se ha producido una “fenomenal transferencia de recursos” desde las provincias más postergadas hacia las provincias más ricas, distribuidos por el Estado Nacional. Como contraprestación, los productores solo han recibido una “red vial en emergencia” y “niveles de inseguridad preocupantes”, entre otros problemas acuciantes.

La medida oficial

El gobierno de Javier Milei anunció en mayo la prórroga de la baja de retenciones (temporal) para el trigo y la cebada hasta el 31 de marzo de 2026, no así para la soja, el maíz, el girasol, el sorgo y todos sus subproductos.

Dólar, precios y retenciones: lo que dejó la semana en materia económica

El campo del norte ha reclamado a la administración libertaria mantener las retenciones en 9,5% para el maíz y en 26% para la soja por más tiempo, así como su demanda central: la eliminación total de los derechos de exportación para estos cultivos. Las reducciones que habían sido anunciadas en enero: en la soja, bajaron de 33% a 26%; en soja y derivados, pasaron de 31% a 24,5%; en trigo, de 12% a 9,5%; cebada, de 12% a 9,5%; sorgo, de 12% a 9,5%; maíz, de 12% a 9,5%; y en girasol, de 7% a 5,5%.

Entre los productores todavía existe cierto optimismo acerca de que el Gobierno nacional atenderá el reclamo del campo, en un momento en que las liquidaciones de las divisas por parte de los agroexportadores están apuntalando las reservas del Banco Central. Se esperan novedades en ese sentido para la próxima semana.