La recaudación impositiva de mayo sufrió un duro golpe, con una caída real del 18% interanual, la mayor desde octubre de 2024. Este desplome se explica principalmente por el fuerte descenso en la recaudación del Impuesto a las Ganancias, sumado al impacto de la eliminación del Impuesto PAIS y la reducción de aranceles a las exportaciones.

Según datos de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), la recaudación total alcanzó los $15.862.862 millones, lo que representa un aumento nominal del 18,6% respecto al año anterior. Sin embargo, al descontar la inflación, se revela la significativa contracción.

Ganancias, el principal factor de la caída

El Impuesto a las Ganancias fue el principal problema, con una disminución nominal del 13,3%. "Este mes operó el vencimiento del pago del saldo de la declaración jurada por el período fiscal 2024. La variación interanual negativa obedece a que en mayo 2024 se había registrado un ingreso extraordinario derivado del buen desempeño del sistema financiero en el año 2023", explicó ARCA.

El economista Nadin Argañaraz (Iaraf) destacó el peso de esta caída: "Dada una caída real interanual de 40% de la recaudación del impuesto a las ganancias, la recaudación tributaria total cayó un 18% real interanual. Si no se considera ese tributo, la baja real interanual es de 2,4%".

Impacto en el acumulado anual

La fuerte caída de mayo impactó en el resultado acumulado del año. Mientras que hasta abril la recaudación mostraba un aumento real del 7,6%, tras el resultado de mayo, el crecimiento se redujo a apenas un 1% interanual.

Argañaraz detalló que los tributos con mayor caída en los primeros cinco meses fueron Bienes Personales, derechos de exportación, Ganancias e impuestos internos. En contraposición, los que más aumentaron fueron el impuesto a los combustibles, Seguridad Social e impuesto al Cheque.

Otros factores que influyeron

-Derechos de exportación: disminuyeron un 7,5% nominal, debido a la reducción de aranceles y a menos días hábiles de recaudación.

-IVA: tuvo un crecimiento real del 3,1%, aunque afectado por la suspensión de la exención de certificados de exclusión de la percepción en la Aduana.

-Impuesto a los combustibles: mostró un fuerte aumento real del 38%, impulsado por las actualizaciones del impuesto.

-Impuesto a los créditos y débitos: aumentó un 22% real, aunque impactado negativamente por un día hábil menos.