Una cumbre inédita entre el Poder Ejecutivo y la Municipalidad de San Miguel de Tucumán que se viene ideando desde hace medio año. Un trabajo conjunto de los gabinetes del gobernador, Osvaldo Jaldo, y de la intendenta de la Capital, Rossana Chahla, para buscar soluciones conjuntas. Una foto de unidad, que en un año electoral toma un valor preponderante y ayuda a silenciar rumores políticos. Pero más allá de las buenas predisposiciones, hubo tensiones y reproches que afloraron durante en el encuentro, especialmente contra las carteras de Salud y de Desarrollo Social.

Más de dos horas duró la reunión que se llevó a cabo en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno y de la que participaron cerca de medio centenar de funcionarios provinciales y municipales entre ministros, secretarios y directores. Jaldo habló de “un hecho histórico”. “Nunca se vio una reunión de estas características. Quienes estamos aquí somos un solo equipo de trabajo”, remarcó el mandatario. Chahla, por su parte, le brindó todo su respaldo al gobernador en un año electoral que, de algún modo, pondrá a consideración social la gestión de gobierno.

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Participantes del encuentro explicaron que la dinámica del encuentro fue de coordinación y de trabajo en conjunto entre las mismas áreas de una administración y de la otra. Afirmaron que se abordaron 17 puntos en total, englobados en las áreas de Salud, medio ambiente, Desarrollo Social, asistencia en caso de fenómenos meteorológicos y la situación económica en general. A pesar de las expectativas que se generaron, en esta ocasión no fueron abordadas dos temáticas sensibles para la sociedad: lo vinculado con la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) y con el transporte público. Se afirmó que las cuestiones vinculadas con el servicio de agua y cloacas se abordarán prontamente, en un encuentro más privado.

Tensión por vacunas

La propia intendenta Chahla blanqueó en rueda de prensa que se abordaron temáticas en las que había dificultades de trabajo en conjunto, pero también en cuestiones en las que se trabaja muy bien: Seguridad (Patrulla de Prevención Ciudadana y cámaras de seguridad); y con Gobierno y Justicia (Registro Civil y la gestión y entrega de DNI en los barrios). Con el Ministerio de Obras Públicas (a cargo de Marcelo Nazur) hizo la salvedad de que se habló mucho, pero no se avanzó aún con obras pluviales, y que con Desarrollo Social no logran articular, no por falta de diálogo con Federico Masso, sino por el tipo de estructuras robustas.

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Los principales cuestionamientos de la intendenta fueron ante la falta de coordinación con el Ministerio de Salud que conduce Luis Medina Ruiz. “Lamentablemente lo entiende el ministro y dos o tres personas más, pero hacia abajo no. Será que no entienden o creen que la política atraviesa todo esto. Y nosotros creemos que la vacuna es apartidaria; y si no nos las quieren dar, no hay problemas: que vayan a colocarlas. Creemos que las vacunas tienen que estar colocadas, no en una conservadora”, expuso.

Fuentes municipales afirmaron que cuando llaman a algún funcionario de segunda y tercera línea de la cartera sanitaria no obtienen la respuesta que esperan ni la velocidad que se necesita. “El ministro se comprometió a trabajar de modo más inmediato”, aseguraron.

Chahla dijo que lo que se expuso no fueron tensiones, sino realidades, pero que todo se dio en el marco del respeto. “Que estén todos los funcionarios y que nos comprometamos de ahí para abajo a buscar soluciones y no buscar problemas, me parece extraordinario”, dijo.

“Lugar equivocado”

El ministro de Gobierno y Justicia, Regino Amado, destacó el valor del encuentro y afirmó que siempre tendrán tiempo para atender los problemas de la provincia, municipios y comunas. “Hoy el centro ha sido el ciudadano, para atender mejor al ciudadano”, dijo. A su vez, hizo una lectura política de la cumbre de Jaldo y Chahla con sus equipos: “hoy hay muchos dimes y diretes sobre la relación entre el gobernador y la intendenta. Quiero decirles que la relación es espectacular. Yo creo que la relación es mejor imposible. Todo tiene por objeto mejorar la calidad y la atención de cada una de las reparticiones del Estado”, expuso.

El ministro remarcó que la política está para solucionar problemas de la gente, y que muchas de las conversaciones se dan para discutir cómo hacerlo de la mejor manera. “El gobernador bajó la línea que tiene que bajar a cada funcionario. El que no esté de acuerdo en el trabajo conjunto entre el municipio de la Capital y la Provincia está en el lugar equivocado. Lo mismo pasa en lo político, por eso sumé también al vicegobernador, Miguel Acevedo, quien dijo que va a acompañar la gestión y la política del gobernador Jaldo”, dijo.