En algunas áreas de la costa mediterránea de Israel, los tiburones rondan hace años. Este lugar no solo atrae a peligrosos depredadores si no también a curiosos que buscan sumergirse en esas aguas. Este miércoles los restos de una víctima que realizó una de esas temerarias visitas, según informaron las autoridades del país Medio Oriente.
La muerte de socorristas en Gaza fue un error, dice IsraelLa policía de Israel encontró los restos de un hombre que murió por un ataque de tiburón este miércoles, tras dos días de búsqueda. La víctima fue identificada como Barack Tzach, un hombre de unos 40 años y padre de cuatro hijos que se sumergió en las aguas en medio de la creciente convocatoria de visitantes.
Cómo ocurrió el accidente
En una publicación de Facebook, una mujer que los medios israelíes identificaron como la esposa de Tzach dijo que este había entrado en las aguas con equipo de snorkel y una cámara subacuática. No era la primera vez que nadaba en esa zona del mar, añadió.
"Barak entró al agua para bucear y documentar a los tiburones, no para alimentarlos ni jugar con ellos", escribió Sarit Tzach. Añadió que un pescador que acompañaba a su esposo le dijo que no los tocó ni los alimentó.
Cuando los tiburones se acercaron demasiado, dijo, usó el palo que sostenía su cámara para "distanciarlos suavemente". El pescador entonces llamó a Tzach para que volviera a la orilla y, mientras regresaba lentamente, fue atacado, escribió Sarit Tzach. Tras el ataque, las autoridades israelíes cerraron la playa y las zonas cercanas. Luego de dos días de búsqueda, hallaron los restos que coincidían con los del hombre.
Contactos cada vez más cercanos
Según indicaron desde CBS News, un cardumen de tiburones oscuros y tiburones trozo, una especie en peligro de extinción, nada cerca del área durante años, atrayendo a curiosos que se acercan a los depredadores y provocando peticiones de grupos conservacionistas para que las autoridades separen a las personas de los animales salvajes.
Los tiburones oscuros pueden alcanzar los 4 metros de largo y pesar unos 340 kilos. Los tiburones trozo son más pequeños, alcanzando los 2,4 metros y los 100 kilos.
En los últimos días, las aguas atrajeron a grandes multitudes que fueron vistas nadando con los tiburones. Algunos les tiraron de la cola y les lanzaron comida, informaron desde el medio citado. Las autoridades condenaron este comportamiento y emitieron advertencias para no acercarse a los tiburones. Está prohibido nadar en la playa, pero los bañistas pueden entrar al agua de todas formas.