La felicidad implica todo un conjunto de procesos químicos en nuestro cuerpo. Esa emoción que nos da tanta satisfacción tiene toda una raíz fisiológica, a través de las llamadas "hormonas del bienestar", un cuarteto de neurotransmisores que definen un buen estado anímico. Y aunque la alegría muchas veces sea accidental por acontecimientos de la vida inesperados, existen maneras de activar estos mensajeros intencionalmente.

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Nuestra alegría depende de cuatro populares hormonas: la dopamina, serotonina, endorfina y oxitocina. Reciben el nombre de mensajeros del bienestar ya que suelen producir sentimientos felices, explica la Escuela de Medicina de Harvard (HMS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.

Cuando las glándulas las liberan en el torrente sanguíneo actúan en varios órganos y tejidos para controlar desde la forma en que funciona el cuerpo hasta cómo se siente, explicaron desde Harvard.

La función de las hormonas de la felicidad

Así la dopamina juega un rol importante en el aprendizaje y la atención en el ánimo, el movimiento, el ritmo cardiaco, la función del riñón y de los vasos sanguíneos, en el procesamiento del dolor y en la lactancia. La serotonina afecta a funciones y comportamientos como la memoria, el miedo y la respuesta al estrés.

Las endorfinas son consideradas analgésicos naturales del cuerpo, dado que el cuerpo las libera en respuesta al dolor o al estrés. Y la oxitocina es bastante particular, ya que aparece en el nacimiento para facilitar el parto y es la hormona del amor cuando las personas se enamoran. Además, se cree que la oxitocina disminuye los niveles de estrés y ansiedad.

Cómo estimular las hormonas de la felicidad

Para aumentar los niveles de las hormonas del bienestar bastan algunos cambios simples en el estilo de vida, asegura la HMS. Desde National Geographic detallaron cuáles son esos hábitos que estimulan esos mensajeros.

1. Llevar una alimentación adecuada

Debido a que la dopamina está hecha de tirosina, obtener más de este aminoácido mediante los alimentos podría potencialmente aumentar los niveles de dopamina en el cerebro, indica la escuela de medicina.

A través de la alimentación también se puede estimular la serotonina. Según Harvard, el triptófano (el aminoácido que usa el cerebro para producir serotonina) se puede obtener de fuentes de carbohidratos complejos como verduras, frutas, legumbres y cereales integrales.

2. Meditar

También es posible elevar los niveles de dopamina y endorfinas mediante la meditación. Respirar profundamente y enfocar el cerebro calma la mente y alivia el dolor.

3. Hacer ejercicio

Por otra parte, la práctica de ejercicio físico puede contribuir a elevar estas hormonas. Según Harvard, andar en bicicleta o levantar pesas ayuda al cuerpo a liberar triptófano y, en consecuencia, la serotonina. A su vez, caminar o realizar actividades aeróbicas son formas de elevar las endorfinas y la oxitocina.

4. Pasar tiempo al aire libre y con luz solar

Otro aspecto que eleva naturalmente los niveles de serotonina es la exposición al sol o a la luz brillante destinada a replicarlo. A su vez, pasar tiempo al aire libre bajo el sol estimula la liberación de beta-endorfinas en la piel.

5. Reir

Reír puede hacer maravillas por el estado de ánimo, asegura la escuela de Harvard. Además de liberar endorfinas, la risa altera los niveles de serotonina y dopamina .

6. Hacer actividades artísticas

Según Harvard, cantar, bailar o tocar un instrumento ayuda a liberar una “ráfaga de endorfinas” que podría aumentar la tolerancia al dolor.

La música también parece tener la capacidad de aumentar los niveles de oxitocina, especialmente cuando las personas cantan en grupo, lo que agrega el elemento de unión.

7. Abrazar

Por último, el acto de tocar a un ser querido sirve para estimular la liberación de oxitocina. Darle un masaje a alguien, acurrucarse, tener sexo o abrazar conduce a niveles más altos de esta hormona y a una mayor sensación de bienestar.