El panes un elemento básico en la dieta de millones de personas en todo el mundo. Ya sea integral, blanco, de trigoo de centeno, mantenerlo fresco y suave es una preocupación constante. 

Afortunadamente, existe un truco casero efectivo para prolongar su vida útil y disfrutar de su frescura por más tiempo.

Consejos para conservar el pan fresco

Para mantener el pan fresco y esponjoso durante más tiempo, es fundamental seguir ciertos consejos de almacenamiento:

Temperatura y entorno: conserva el pan a temperatura ambiente en un lugar seco y alejado de la luz solar directa. Almacenarlo en una bolsa de papel o tela permite que respire y conserve su humedad, lo que ayuda a evitar que se endurezca rápidamente.

Uso de paneras: las paneras son excelentes para conservar el pan, ya que lo protegen de la luz y permiten una ventilación adecuada. Se recomienda utilizar paneras de madera, ya que las de plástico pueden afectar la textura y frescura del pan.

Evitar la heladera: Aunque el frío puede prolongar la vida útil del pan, la heladera tiende a resecarlo y cambiar su textura. Es preferible evitar colocar el pan en el refrigerador.

Usar el freezer: Si deseas conservar el pan por períodos más largos, el congelador es tu mejor aliado. Corta el pan en rebanadas o utiliza recipientes herméticos para almacenarlo en el congelador. Antes de consumirlo, descongélalo en la heladera durante unas horas para mantener su aroma y textura original.