Comprar en redes: ¿Cómo estar seguros y evitar estafas?

Con el paso del tiempo, las compras por internet parecen haberse vuelto una conducta cada vez más habitual en muchas personas, pero también están aquellas que siguen tratándolas como un tabú por el riesgo que esto puede conllevar. La pandemia generada por la Covid-19 se convirtió en un escenario ideal para aquellos usuarios que tuvieron que volcarse a la red para comprar o vender una diversidad infinita de productos. Según la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), el volumen de ventas de comercio electrónico de Argentina aumentó en un 124% durante 2020, en relación a 2019. De acuerdo a ese reporte, las ventas totales sumaron más de 905 mil millones de pesos –una cifra cercana a los 9,3 mil millones de dólares-. Una cifra que corresponde a 164 millones de órdenes de compra.

Por otra parte, un estudio global de compradores de comercio electrónico realizado por Think With Google y Kantar detalló que el 30% de compradores online en Argentina realizaron su primera compra durante el 2020. Ese trabajo además reveló que el 7% de compras en línea en Argentina durante 2020 se realizaron a través de redes sociales.

En este contexto, diferentes plataformas permiten operar de esta manera hoy en día, pero Marketplace se ha posicionado como una de las más populares. La herramienta de la ahora compañía Meta se presenta ante los usuarios como una manera sencilla de “buscar artículos nuevos y usados, como ropa, muebles, autos e, incluso, viviendas en alquiler” porque permite ver qué venden las personas de tu comunidad. La plataforma también incluye artículos nuevos que venden en los negocios por lo que también permite buscar ofertas de las principales marcas directamente.

No resulta un dato menor conocer que todas estas transacciones realizadas en nuestro país se dieron sin un marco legal porque Argentina todavía no cuenta con leyes específicas sobre las compras y las ventas que se realizan vía internet. Actualmente, toda la normativa de protección del consumidor es aplicable a este comercio siempre y cuando se realice el intercambio con empresas.

Recomendaciones para estar seguro

En primera instancia, la plataforma de la compañía Meta sugiere ver el perfil de Facebook de la persona, los amigos que tengan en común y su calificación como vendedor. Para quienes acuerden un encuentro con el potencial comprador, la empresa propone hacerlo en un lugar público y bien iluminado, además de compartir el encuentro con un amigo o un familiar de confianza a través de Messenger.

Al comprador se le recomienda que en primera instancia pregunte por la disponibilidad del producto y solicite mayor información del mismo. Además en la negociación se puede acordar un nuevo precio (que no necesariamente coincida con el que fue publicado). Y si llegases a tener dudas sobre la calidad del mismo, siempre es mejor preguntar al vendedor por la posibilidad de ver antes físicamente el producto. Incluso, para evitar ser víctimas de estafas en la compra, la red social recomienda evitar las propuestas que te invitan a pagar por fuera de Facebook para obtener un mejor precio y no responder a mensajes o correos electrónicos que te pidan información de tu cuenta, como la dirección de correo electrónico o la contraseña.

Para el momento de pagar también hay consejos. En relación a esto destacan no hacer transferencias directamente a la cuenta bancaria del vendedor y ofrecer la posibilidad de usar un sitio de pago seguro de contacto directo entre usuarios, como PayPal. “Si decides pagar mediante un método electrónico, como una transferencia o un giro postal, evita los enlaces de pago e inicia sesión directamente en el sitio web del método de pago que elegiste. Ten en cuenta que los cheques certificados y de caja pueden ser falsos. Las transacciones se llevan a cabo únicamente entre el comprador y el vendedor, y no existe garantía de terceros”, señalan desde la plataforma.

Finalmente, a los usuarios que desean comprar un artículo de alto costo económico se les aconseja revisarlos para asegurarse que son auténticos y se encuentren en buen estado. Para estos casos, el comprador podría solicitar un certificado de autenticidad o el comprobante de compra.