Por Martín Dzienczarski
02 Diciembre 2020
El cambio de fase en Tucumán, que pasó del aislamiento al distanciamiento social, derivó en la decisión del Poder Ejecutivo de extender el horario de servicio de trabajadores estatales: de 8 a 16. Los funcionarios del Gobierno provincial explicaron que la medida no trastoca las rutinas de trabajo, sino que simplemente tiene alcance legal. Los gremios estatales, en cambio, rechazaron el decreto y reiteraron los reclamos del sector: paritarias y bono de fin de año.
“Dispónese que, entre el 30 de noviembre y el 20 de diciembre de 2020, inclusive, el horario de prestación de servicios para el personal de la Administración Pública Provincial Centralizada y Descentralizadas, incluidas las comunas rurales, quedará comprendido entre las 8 y 16”, reza el primer artículo del decreto 2.252. Los demás artículos establecen que la medida no alcanza a los servicios de Salud Pública, Seguridad o al personal del Ministerio de Desarrollo Social, Secretaría General de la Gobernación, Catastro y Rentas, entre otros. Tampoco incluye a trabajadores mayores de 60 años de edad o quienes forman parte de grupos de riesgo de contagio de covid-19.
Lucinda Espeche, secretaria general de la Unión de Personal Civil de la Nación (UPCN), rechazó la modificación. “Estamos tomando muy mal esta medida porque no han consensuado nada. No preguntaron nada. Estamos en pandemia, todavía no ha pasado, lo dijo la ministra de Salud, hasta que no haya menos de 50 casos no se puede decir que esto ha pasado. El decreto es como si debiéramos volver todos a trabajar mañana pero los directores no saben cómo se llevará adelante. Hay oficinas en donde está sentado uno encima del otro, no se podría. Deberían preocuparse en darnos un bono porque nos hace falta a los estatales y porque el sueldo está por el piso”, planteó la dirigente.
La ministra de Gobierno, Carolina Vargas Aignasse, buscó llevar calma y aseguró que el instrumento puede haber sido malinterpretado. “Este decreto de extensión del horario hasta las 16 está siendo muy mal interpretado. Quiero ser muy contundente: el decreto no modifica de manera alguna la actual situación del empleado público. Se trata de un rigor formal acorde a que la provincia se encuentra en Dispo y no en ASPO. Lo que sucede es que el empleado no se considera dispensado de por sí (de prestar servicio), sino que está a disposición laboral porque nos encontramos en una fase de distanciamiento social preventivo y obligatorio. Es decir, que el empleado puede trabajar. Estamos obligados a seguir todos los protocolos, por lo que no está la voluntad de la administración de convocar a los empleados, lo que el decreto establece diferente es la posibilidad de extender el horario laboral interno de administración hasta las 16, sujeto a protocolos y turnos para subsanar la situación que quien tiene extensión horaria y quien no la tiene”, expuso Vargas Aignasse. Y agregó: “Quien tiene extensión horaria podrá ser convocado a trabajar hasta las 16. Este decreto no modifica la actual situación ni el status del empleado en términos prácticos. Es una modificación de terminología legal. Quienes forman parte de grupos de riesgo seguirán dispensados de trabajar, quienes no pueden trabajar pero siempre atendiendo a los protocolos del caso”.
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