Por LA GACETA
30 Mayo 2020
- El recurso olvidado
Es probable que en un par de meses, en algunas provincias se pueda retornar a la escuela. La vuelta requerirá de consideraciones que tienen como denominador común el cuidado de la vida en tiempos de pandemia. Carlos Skliar, prestigioso investigador del Conicet, alerta sobre la “necesidad de arreglar la casa para el encuentro, pensar la arquitectura, los modos de transitar, los vínculos y los recursos, para que sea un lugar hospitalario” y seguro. Lo material sin recursos humanos suficientes es una inversión inútil. En nuestra provincia hay escuelas que vienen solicitando, desde hace años, la cobertura de personal auxiliar. Es un problema irresuelto, dejado de lado, remediado a medias según la voluntad del Gobierno local, las familias o resuelto con maestros y directores que limpian y cocinan, y enseñan. En esta última instancia alguien sale perdiendo: el cuidado del tiempo dedicado a la enseñanza de niños y adolescentes. Ningún proyecto educativo puede dejar de lado los recursos humanos necesarios y suficientes. El personal auxiliar es prioritario para asegurar condiciones dignas de salubridad. Tal vez sea necesario un reordenamiento de los recursos humanos y la consideración de la retribución por zona de ubicación o similar para que no se lesionen derechos adquiridos. No puede haber escuelas sin personal auxiliar y otras donde la cantidad de ellos no justifica ni la matrícula ni la arquitectura.
Susana C. Díaz
- El ejemplo de Belgrano
El Parlamento nacional va a considerar una ley que establezca el denominado “Impuesto a la Riqueza” (por única vez) que alcanzaría a alrededor de 15.000 megamillonarios, en nuestro país de más de 44 millones de habitantes, con alícuotas en tasas crecientes del 2% al 3,5 % sobre los patrimonios desde los U$S 3 millones. Se estima, así, recaudar alrededor de U$S 3.500 millones. Como era obvio, el egoísmo y la falta de solidaridad de quienes más tienen y sus voceros, se han hecho sentir de una manera sorprendente. Entonces surge cada vez más grande y más patriota del insigne general Manuel Belgrano, de cuyo nacimiento celebramos el 250 aniversario el 3 de junio. Hay que leerlo y releerlo para conocer acabadamente su concepción del bien común (hoy solidaridad). El 14 de julio de 1813, Belgrano dirigió un bando a los ciudadanos de Jujuy, a propósito de su planteo antes del Éxodo Jujeño, esfuerzo inconmensurable, si los hay, en el camino hacia la creación de una Patria independiente. Decía: “Cuando el interés general exige las atenciones de la sociedad, deben callar los intereses particulares, sean cuales fuesen los perjuicios que experimentasen. Este es un principio que sólo desconocen los egoístas y los esclavos, y que no quieren admitir los enemigos de la causa de la Patria. Causa a la que están obligados los que disfrutan de los derechos de propiedad, libertad y seguridad en nuestro suelo, debiendo saber que no hay derechos sin obligación, y quien sólo aspira a aquel sin cumplir con esta, es un monstruo abominable, digno de la execración pública y de los más severos castigos”. Gracias, General, por dejarnos esta enseñanza que hoy nos hace tanta falta. Más que nunca.
José Schulman
Juan B. Terán 680 - Yerba Buena
- Subsidio de Salud
Mi madre sufre Alzheimer avanzado con 100% de discapacidad. Es jubilada y todos los meses le descuentan rigurosamente el aporte para la obra social Subsidio de Salud. Tiene una cuidadora que presta servicio para el Subsidio y a la que le deben los servicios prestados durante los meses de febrero, marzo, abril, y dentro de unos días, mayo. La cuidadora presentó toda la documentación en papel y por email y los trámites que corresponden para recibir su remuneración, como lo hace siempre (número de trámite de febrero: 4301-6055-2020; los otros ni existen todavía). Lo “normal” es que le atrasen el pago un mes o un mes y medio. Vamos casi todos los días al Subsidio de Salud para saber cuándo le van a pagar y recibimos todo tipo de justificaciones de por qué no lo hacen (“la doctora no ha llegado”; “el empleado está de licencia”; “el empleado salió y ya vuelve”; “venga mañana que va a estar listo”; “el jefe todavía no lo vio”…). La cuidadora ya no tiene dinero ni para comer, ni para ir al trabajo, y nosotros tampoco para pagarle lo que el Subsidio le debe. ¿Quién sobrevive sin recibir cuatro meses de salario? ¿Las autoridades y los cientos de empleados de la institución, también están sin recibir sueldo desde hace cuatro meses? ¿Gobernador, ministros y demás funcionarios, reciben el mismo tratamiento? ¿Cuál es la función de un interventor? ¿Adónde van los aportes descontados de los miles de afiliados? ¿Quién será el responsable por lo que suceda con la salud de mi madre y la de los afiliados que pasan por lo mismo? ¿Alguien responderá estas preguntas?
Lucía Canevaro
- Profesionales contables
He escuchado con sorpresa las palabras vertidas por el presidente de la Nación, Alberto Fernández, en la que textualmente expresaba: “Una simplificación a las empresas les vendría muy bien, porque les evitaría mucho trámite, mucho gasto administrativo, mucho gasto en contadores”. Mi sorpresa se incrementa cuando pienso que quien realiza esta desafortunada expresión, es alguien que se esfuerza permanentemente en destacar que es un académico universitario. Mis 48 años de docente e investigador en la disciplina contable y mis 17 libros escritos en la especialidad, me avalan para decirle y aclararle al Presidente que, cuando una empresa incorpora a un profesional contable en su organización, no está realizando un gasto, sino, por el contrario, está realizando una inversión en un recurso humano capacitado, tanto en conocimientos, habilidades como con valores morales y éticos, para aportar una excelente herramienta de gestión, como lo es la información contable. Esta herramienta permitirá, ayudará y facilitará a los administradores de dicha empresa a cumplir con sus objetivos de la manera más eficaz, eficiente y sustentable. ¿Qué quiero decir con todo esto? Que la visión de creer que el contador público es un “mal necesario” en la organización ya que únicamente hace la tarea de “liquidador de impuestos”, es una visión limitada y equivocada. Más grave aún, cuando dicha aseveración proviene de un docente universitario que pertenece a una disciplina que tiene una afinidad muy grande con las ciencias económicas, como lo es el Derecho, que realmente conoce cuál es la tarea que desempeña un contador y cuál es la estrecha colaboración que existe entre ambas disciplinas, por ejemplo en el ámbito de la justicia, en la administración pública, en liquidación de sociedades, en el ámbito laboral, etc. En todo caso, si no tiene del todo claro cuál es la función del contador público dentro de la sociedad, que se haga asesorar, de la misma forma que para decidir en salud tiene a su grupo de expertos. Ya nos sorprendimos en épocas anteriores cuando alguien dijo que los sueldos eran gastos y los políticos, entre los que se encontraba él, se rasgaron las vestiduras denostando esa aseveración y repudiándola, repudio la que me adherí. Mi pregunta es ¿y ahora?, ¿el servicio contable es gasto? ¿seremos la variable de ajuste para reducir gastos de la organización? Todo esto me trae una reflexión que desde hace tiempo sostengo: el poder y/o la responsabilidad del poder, en algún momento obnubila hasta las mentes más preclaras.
Héctor C. Ostengo
- La pobreza como excusa
Cuando observo la cantidad de casos de contagiados con coronavirus en las villas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y las del conurbano bonaerense, observo que estos asentamientos humanos siempre tienen mucho en común. El amontonamiento de Personas en habitaciones de reducido tamaño; la falta de baños, cocinas y comedores adecuados; la carencia de infraestructura básica -falta de agua, luz, gas, cloacas, pavimento, servicio de recolección de residuos, atención sanitaria (acceso a la Salud), escuelas en todos los niveles (jardín, primario, secundario) y ni hablar de los niveles terciario y universitario; la falta de empleos de calidad (lamayoría sobrevive de changas; las mujeres en trabajos domésticos y los niños en el cirujeo).
Esta vida de miserabilidades donde millones de seres humanos son sometidos a condiciones deplorables no parece que vaya a cambiar; todo lo contrario, va creciendo a niveles alarmantes y es muy posible que más del 50% en el país sean pobres. El gobierno anterior (Mauricio Macri) ganó las elecciones prometiendo que iba a haber pobreza cero; todo lo contrario. El actual Presidente, Alberto Fernández, en sus cinco meses de gestión, tiene dos frentes de batalla: priorizar la vida de los argentinos con una cuarentena obligatoria, y atender las negociaciones de la deuda externa.
Pero no hay más margen en el mundo para sostener estos niveles de desigualdad social; la pobreza debe ser erradicada de una vez y para siempre; no hay excusas. Los privilegios en el mundo tienen los días contados. La sociedad global tiene que estar en condiciones de generar estos cambios profundos para bien de la humanidad.
Luis Alberto Marcaida
- ¿Quién custodia la custodia?
Al 27 de mayo transcurrieron 17 días de paro del transporte público en un mes de 30 días, durante una pandemia mundial que afecta a los sectores más vulnerables de la sociedad. Los subsidios de la provincia y de la Nación ya han sido abonados, abono que cubre 30 días de prestación de servicio. ¿Qué hará la Legislatura con la ley que se promulgó para atender ese caso puntual? ¿Exigirá el Poder Ejecutivo la devolución del subsidio por el tiempo que no se prestó el servicio? El sainete del otoño sigue; en las máscaras del teatro griego una mostraba una risa, la otra un rictus doloroso; la comedia y la tragedia unidas; cada capítulo va mostrando que, salvo que el reclamo del público haga ostensible su desagrado con el argumento, el equipo sindical-empresarial, guionista de una de las novelas, quiere dale un perfil más antipopular. El emperador romano Nerón pronunció la frase “quid custodes ipsus custodes” ¿quién custodia a la custodia? En el Tucumán de hoy, esa pregunta se formula a todos los poderes; el caso Espinoza interpela a la sociedad. Los policías que patotean a un obrero entre nueve y un civil que los ayuda, ¿qué significan? La telenovela sigue; cada capítulo emitido es más trágico. ¡Basta! Los tucumanos tenemos derecho a un presente mejor en el camino a un futuro mejor. Merecemos que la salida de la cuarentena alumbre un porvenir.
René Carlos Roncedo
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