Hace 20 años: con “Narigón del Siglo”, Divididos alcanzó el máximo de popularidad

No es frecuente que en cada álbum surja un tema que pasará a la historia del rock. Divididos lo está logrando desde su primer disco, cuando publicó “40 dibujos ahí en el piso”, en 1989. Cuando se le pregunta a Tony Molteni, responde que su preferido es el “38” y que de “Narigón del Siglo” elige “Spaghetti del Rock”.

Este emblemático disco cumple 20 años. “Tremendo álbum de Divididos; el ‘Narigón’ es uno de los preferidos. En Villa Luján fue increíble el show que dieron en 2003. Ya habíamos tocados con ellos ese mismo año en Cosquín y en Salta -cuenta la voz líder de Karma Sudaca-. En esa época estábamos presentando ‘Sangrando sueños’ y compartir escenario con ellos era todo un desafío. Es una de las bandas que mejor suena en vivo y teníamos que estar a la altura, por suerte salió todo más que bien”. “Qué ves” o la versión de “El arriero”, del disco “La era de la boludez” (1993), son otros temas que hoy se celebran efusivamente.

Hace dos décadas, Divididos publicaba su sexto trabajo de estudio con el que el grupo atravesaba de manera triunfal el cambio de centuria. Fue grabado en los míticos estudios Abbey Road, de Londres, con clásicos como “Par mil”; la banda conformada por Ricardo Mollo, Diego Arnedo y el baterista Jorge Araujo, en ese entonces, resumía ya desde el título los ajetreados años 90, que atravesó desde distintos estados, informa la agencia Télam. “Le pusimos ese nombre porque los que marcaron los 80 y los 90 fueron los narigones, o sea, los mentirosos y los que toman cocaína. Lo de narigón es nuestro símbolo para hablar del vicio y la hipocresía de estos últimos años”, resumió en su momento Mollo, en una síntesis de la década del festín neoliberal, con la llegada de los “nuevos ricos”.

Mágico

“Ese disco fue mágico en todo sentido. Fue un pico de coincidencia artística y conocimiento entre los tres. Estábamos muy enfocados. Amo todos los discos que hice con Divididos, pero el ‘Narigón...’ fue una bisagra. Fue muy movilizador en muchos sentidos”, recordó Araujo en diálogo con Télam.

“Esa obra fue enorme; junto con ‘Amapola del 66’, las mejores de la banda. Con ‘Narigón del Siglo’ llegan a su mayor grado de popularidad y es una obra sólida, poética. Con Araujo aún y con temazos ‘Como un cuento’, una de las canciones más hermosas del rock nacional. También está su mirada irónica (desde la tapa y el nombre) a los ‘90’”, describe el productor Gabriel Fulgado, quien fue responsable de diversas presentaciones del grupo en esta provincia.

No había sido la primera vez, pero la “aplanadora del rock” tuvo un show impresionante en 2003, en el club Villa Luján. “Mollo se zarpó el sábado por la noche. Cuando concluyó su último tema rompió las cuerdas de la guitarra, las arrojó al público, se sentó en el escenario y se tiró al foso, y quedó atrapado entre este y el público. Visiblemente ‘volado’, hizo pasar un momento de tensión a los guardias de seguridad, que tuvieron que intervenir para evitar que los fans lo tocaran. El show no pudo concluir como acostumbra el grupo: Mollo, Araujo y Arnedo, abrazados, despidiéndose de la gente”, relataba LA GACETA sobre ese recital.

“Fue mi bautismo de fuego, un show espectacular”, dice el periodista especialista en rock Cristhian Sánchez. “Como si fuera una patada en el pecho arranca ‘Casi estatua’. También me gusta ‘Sopa de tortuga’ y el diseño de tapa del tucumano Alejandro Ros”, señala.

El trío ya había estado en Tucumán con la gira nacional para presentar “Otroletravaladna”, que comenzó el 19 de agosto de 1995 y terminó el 28 de febrero de 1998. Ese fue el primer tour que realizaron con el baterista Araujo. Uno de los fans infaltables del rock, Luis Balderrama, asegura que en 1997 el grupo tocó en Villa Luján. Pero el productor Juan Luis Salvatierra solo recuerda la presentación en 2003.