El desafío para el recambio energético

Los técnicos especialistas en caña de azúcar que participan del XXX Congreso Internacional de la Caña de Azúcar, inscriptos para el tours industrial, fueron este fin de semana al ingenio La Florida, fundado en 1894 y últimamente adquirido por la compañía Azucarera Los Balcanes (1994).

El cronograma previsto por los organizadores incluyó el recorrido por la fábrica, la zona de trapiches y donde funciona la caldera nueva, la planta de energía, la nueva planta de ceniza y donde se fábrica de azúcar. También los tecnólogos pudieron apreciar cómo trabaja la moderna destilería, y observar el proceso de fermentación continua y el equipamiento y el concentrador multifacético.

A los visitantes les llamó la atención que el ingenio tiene como lema muy parecido al que se impuso para el Congreso mundial: “cultivando energía. La próxima página”. En este sentido, el ingeniero Juan Carlos Mirande, en su doble función de gerente de Producción Sustentable de la compañía Azucarera Los Balcanes, y vicepresidente del Comité Organizador del Congreso, remarcó que “el mundo y nuestro país tienen una gran oportunidad frente al cambio climático”.

Al respecto, afirmó: “el reemplazo de las energías fósiles es la clave para reducir el riesgo de incremento de la temperatura del planeta. Y la caña de azúcar se vuelve un producto de altísimo valor para la generación de energías renovables a partir del bioetanol de caña”. Apuntó que el etanol es un componente de mezcla eficiente para el combustible ya que proporciona un alto índice de octanaje y permite sustituir componentes que se consideran un riesgo para la salud y el medio ambiente.