Hubo “intervención de externos” en el temario, dijo Rojkés

Dos proyectos quedaron afuera del debate de ayer, pese a que la comisión de Labor Parlamentaria había acordado su tratamiento al establecer el orden del día, y la situación motivó airados reproches de dos legisladoras peronistas.

El momento de máxima tensión tuvo lugar sobre el final de la sesión, cuando el presidente del bloque oficialista Tucumán Crece, Ramón Santiago Cano, pidió la vuelta a comisión de una propuesta de la alperovichista Silvia Rojkés, jefa de la bancada Hacemos Tucumán, destinado a establecer la obligatoriedad de exámenes médicos de control integral para alumnos de instituciones públicas y privadas.

Según Cano, sólo la comisión de Educación y Cultura, a cargo la propia Rojkés, había elaborado el dictamen. “En este caso tiene que haber una evaluación de la comisión de Salud, además de una consulta al Ministerio de Salud”, indicó.

Casi la totalidad del recinto apoyó la moción de Cano, por lo que el asunto fue retirado del debate por tiempo indeterminado. Rojkés, indignada, murmuraba: “es una vergüenza”. Cuando tuvo la palabra, la alperovichista se dirigió al jefe del bloque oficial, que estaba a dos lugares de ella, y le aseguró que el tratamiento de la iniciativa se había ajustado al reglamento de la Cámara. “Duele ver estas cuestiones... Si yo le pregunto al legislador Cano cuál es el fundamento para devolver este proyecto a comisión, y me contesta ‘es algo de los pañuelos celestes’”, exclamó. Y deslizó que esto implicaría que existen “intervenciones de externos” sobre el tratamiento de las iniciativas. “Si van a ser otros los que decidirán por nosotros, les diría que formen parte de la comisión de Labor Parlamentaria”, reprochó Rojkés. Sostuvo que su propuesta sólo apuntaba a la salud de los alumnos que no tienen acceso a un chequeo médico integral. “Lamento profundamente (que no se trate este proyecto), como lamento que no se trate el tema de la prevención de femicidios y de abusos de pedofilia que se dan en esta provincia, porque otros no quieren que se traten”, insistió Rojkés. Cano, molesto, contestó: “la justicia social no se hace de la boca para afuera”. Y aseguró: “todos nuestros niños pueden recurrir al sistema de salud pública, de manera gratuita, con la mejor atención que se puede dar desde el Estado provincial”.

Antes, en otro tramo de la sesión, la peronista Stella Maris Córdoba (bloque Proyecto Popular) había objetado que se retirara del temario la adhesión a la Ley Nacional “Micaela”, que establece la capacitación obligatoria en la temática de género y de violencia contra las mujeres en los tres poderes del Estado. Córdoba señaló que hubo presentaciones en la Legislatura de “organizaciones que están en contra” de la ley Micaela. “Parece una película surrealista. Es una ley que apunta a capacitar a los funcionarios, incluidos los operadores judiciales que actúan cuando una mujer es víctima de violencia. La perspectiva de género no tiene que ver con la idea de género, ni con la educación sexual integrar. Se refiere a la no discriminación y la no violencia contra las mujeres”, indicó.

El vicegobernador Osvaldo Jaldo, al cierre de ese debate, le respondió que a la actual composición le queda más de una sesión hasta renovar las bancas. “Si así lo decide la mayoría, es un tema que se podrá tratar. Le diría que no baje los brazos”, le indicó desde la presidencia.