Historias de amor en la mirada de Ramos Signes

Dos han sido los principales desafíos con los que se ha cruzado Rogelio Ramos Signes en su último trabajo literario: el primero fue escribir, por primera vez en su vida, una novela realista, alejándose de los relatos fantásticos; y, el segundo, ponerse en los zapatos y en la piel de una mujer para contar su historia. Confiesa que lo segundo le ha salido más naturalmente que lo primero: “me gusta escuchar a las mujeres. Me gusta entender qué les preocupa, qué las angustia y qué las divierte. De hecho, las mujeres que la han leído me dijeron ‘sos el que mejor ha interpretado cómo pensamos’”, asegura.

“La sobrina de Úrsula” (Culiquitaca ediciones, 2015) es su quinta novela y el libro número 13 en su haber. Según su propia descripción, es una historia de amor, aunque a decir verdad, son dos historias de amor: una, de un adolescente de 16 años que se enamora de una mujer de 32; la otra, de una jovencita de 20 cautivada por un hombre de 40. Los escenarios principales alternan entre Santa Fe -donde Ramos Signes vivió parte de su vida- y Tucumán -donde se ha instalado desde hace 40 años. “Si uno escribe de lo que conoce entonces tiene menos riesgos de meter la pata y más posibilidades de lograr una historia creíble. Es una gran diferencia con la literatura fantástica, en la que no existen esos tipos de límites: todo puede desarrollarse en una ciudad creada por el mismo escritor”, compara. La última parte del relato transcurre en Tucumán, San Juan (donde el autor nació), y algunos otros pasajes en Rosario de la Frontera.

La presentación oficial de “La sobrina de Úrsula”, novela narrada en primera persona, será este viernes a las 20 en el Centro Cultural Rougés (Laprida 31). Forma parte de la colección Punta de lanza, de la cooperativa editorial Culiquitaca.