Estimulan el uso de fondos públicos para investigación

Agreguen valor a sus productos. Creen puestos de trabajo. Innoven. Desarrollen con un criterio sustentable. Busquen soluciones científicas y tecnológicas para sus problemas productivos. Anímense a producir conocimiento y a llevarlo a la práctica. Den un salto de calidad y den trabajo. Inventen. Emprendan.

Esta música para los oídos del empresario y el científico no vienen de la Luna ni de Marte sino del Congreso Nacional y Provincial sobre Programas del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva y del Ministerio de Industria de la República Argentina. Esa actividad con denominación larguirucha, que comenzó ayer y prosigue hoy, procura que organizaciones públicas y privadas estén al tanto de que pueden pedir -y recibir- subsidios, créditos blandos, capacitación y asistencia técnica, entre otras ayudas, para aplicar a la investigación.

“Queremos que empresarios y científicos se encuentren para resolver las necesidades concretas de la producción, y que sepan que cuentan con los fondos del Ministerio de Ciencia (tiene un presupuesto de $ 4,9 mil millones para 2014)”, dijo Martín Guinart, director de Desarrollo Tecnológico e Innovación de la cartera que encabeza Lino Barañao.

Minutos antes de la apertura del congreso, que tuvo lugar en el salón Blanco de la Casa de Gobierno, el funcionario explicó que la provincia ya aprovecha esas líneas de financiamiento sobre todo en proyectos vinculados a la citricultura; a la caña de azúcar y el tratamiento de la vinaza, y al arándano. “Este dinero también está a disposición de pequeñas y medianas empresas, y el proceso para acceder a la financiación es bastante simple”, añadió Guinart, que destacó que Tucumán dispone de profesionales capacitados adecuadamente para trabajar en ciencia y tecnología. “Sólo hay que ayudar a que estos se unan con los emprendedores que requieren de sus servicios”, insistió el director.

Arenga para alumnos
El propio Barañao iba a incitar a los tucumanos a sumarse al colectivo de la ciencia aplicada a los negocios, pero, a último momento, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner requirió la presencia del ministro en la capital. Con ese aviso parroquial inició su discurso Javier Noguera, titular de la Secretaría de Estado de Innovación y Desarrollo Tecnológico del Gobierno local. “En este congreso queremos mostrar las experiencias de emprendimientos en marcha en la provincia. Hablamos en todos los casos de generar conocimiento, que es una actividad crucial y central para salir adelante”, afirmó Noguera, que luego presentó un video con testimonios de una serie de beneficiados por los programas de la Nación. Entre los proyectos había desarrollos de software y de soluciones integrales para la caña de azúcar.

El turno de discursos prosiguió con Guinart y Andrés E. Elgarrista, subsecretario del Ministerio de Industria de la Nación. Este último hizo hincapié en que la industria tucumana había salido adelante por sus propios medios y que el Gobierno de Fernández de Kirchner quería acompañar ese esfuerzo. Y ejemplificó que era posible conseguir un préstamo a 5 o 7 años al 14% de interés anual. A continuación, Silvia Rojkés, ministra de Educación de la provincia, aplaudió que el salón estuviese lleno, y pidió a los estudiantes de tecnicaturas presentes que piensen y proyecten. “Necesitamos que el dinero y la producción se queden aquí, y que no se lo lleven los buitres”, expresó en referencia a los bonistas que no ingresaron en el canje de la deuda pública.

“El mercado paga la innovación tecnológica. Está en nosotros decidir dónde la ponemos”, dijo por su parte Jorge Feijóo, ministro de Desarrollo Productivo de la provincia, ante la mirada de asentimiento de Jorge Jiménez, ministro de Economía. Y anticipó que la parte más importante del congreso tendrá lugar este viernes, cuando se darán las condiciones para que agentes de la Nación, profesionales, científicos y empresarios intercambien información, ideas, dudas y sueños que, a lo mejor, transformen el pequeño gran mundo y creen empleo.