ENTRE RÍOS.- El sacerdote
Justo José Ilarraz, acusado de abusar sexualmente de al menos 50 seminaristas de entre 10 y 14 años entre 1984 y 1992 en Paraná, solicitó un permiso para salir del país, aunque tiene prohibición para salir al exterior.
Ilarraz tiene doble nacionalidad argentino-española y, según la querella, “se han acreditado por la Dirección Nacional de Migraciones frondosos antecedentes en materia de salidas del país por parte del cura, a Italia y Brasil”.
Según consigna el diario
El Argentino, de Gualeguaychú, el abogado
Marcelo Baridón considera que se debe mantener la prohibición de salir del país “ya que Ilarraz no fundamenta la razón por la que quiere viajar” y advirtió que “Ilarraz es una persona que tiene la capacidad económica suficiente como para moverse en el extranjero”, y que podría fugarse y eludir la acción de la Justicia.
En tanto, el sacerdote debe responder ante la Justicia penal de Entre Ríos por los presuntos abusos. En septiembre de 2012 comenzó a instruirse una investigación, que acumula ya la declaración de siete víctimas, que contaron en Tribunales de qué modo el cura, que entre 1985 y 1993 fue prefecto de disciplina en el Seminario, abusó de ellos, siendo adolescentes, cuando cursaban los primeros años de la secundaria como pupilos.
Luego de las acusaciones, Ilarraz fue enviado al Vaticano para hacer una maestría, y -a su regreso- se lo destinó a la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, en Monteros.