01 Octubre 2013
CATAMARCA.- César Rodríguez, el minero imputado de doble homicidio agravado por alevosía, ya había sido denunciado en diversas ocasiones por la mujer a la que está acusado de haber matado, al colocarle un artefacto explosivo.
Rodríguez convivía con una menor de 16 años, hijastra de la fallecida Justina Flores (de 65 años), en la localidad de Los Nacimientos, departamento Belén. Flores radicó numerosas denuncias contra Rodríguez, a quien acusaba de haber golpeado a la adolescente.
El hombre fue detenido en la provincia de Catamarca acusado de colocar una bomba de fabricación casera en un auto estacionado en un garage de la ciudad de Santa María, cuya explosión mató a una mujer de 65 años y a un remisero de 26, informaron hoy fuentes policiales.
Según dijeron los voceros consultados, el hecho ocurrido el jueves al mediodía y que en un principio se creyó fue la explosión accidental de un tubo de gas, se confirmó luego que fue un atentado.
La hija de la víctima también fue demorada y quedó bajo custodia. El hecho sucedió cerca de las 12 del jueves, cuando la víctima, identificada como María Justina Flores, ingresó al garage de una casa ubicada en el cruce de Ernesto Villafáñez y 1 de Mayo, de Santa María, acompañada por el chofer del remís que la trasladaba, Nery Angel Santos.
Pese a que en un primer momento los policías creían que la explosión se generó porque Santos manipulaba el tubo de gas de un auto averiado estacionado dentro del garage, luego confirmaron que el vehículo funcionaba sólo a nafta y que había claros signos de la detonación de una bomba.
Al inspeccionar la escena, los especialistas hallaron, entre otros restos, pedazos de hierro que suelen ser colocados en bombas de fabricación casera para que actúen como esquirlas.
De acuerdo con esa hipótesis, los pesquisas averiguaron que Rodríguez es empleado de la mina de Farallón Negro, por lo que pudo tener acceso a explosivos, confeccionar una bomba y dejarla sobre el capot del auto para que detonara al ser manipulada por manos inexpertas. (Télam)
Rodríguez convivía con una menor de 16 años, hijastra de la fallecida Justina Flores (de 65 años), en la localidad de Los Nacimientos, departamento Belén. Flores radicó numerosas denuncias contra Rodríguez, a quien acusaba de haber golpeado a la adolescente.
El hombre fue detenido en la provincia de Catamarca acusado de colocar una bomba de fabricación casera en un auto estacionado en un garage de la ciudad de Santa María, cuya explosión mató a una mujer de 65 años y a un remisero de 26, informaron hoy fuentes policiales.
Según dijeron los voceros consultados, el hecho ocurrido el jueves al mediodía y que en un principio se creyó fue la explosión accidental de un tubo de gas, se confirmó luego que fue un atentado.
La hija de la víctima también fue demorada y quedó bajo custodia. El hecho sucedió cerca de las 12 del jueves, cuando la víctima, identificada como María Justina Flores, ingresó al garage de una casa ubicada en el cruce de Ernesto Villafáñez y 1 de Mayo, de Santa María, acompañada por el chofer del remís que la trasladaba, Nery Angel Santos.
Pese a que en un primer momento los policías creían que la explosión se generó porque Santos manipulaba el tubo de gas de un auto averiado estacionado dentro del garage, luego confirmaron que el vehículo funcionaba sólo a nafta y que había claros signos de la detonación de una bomba.
Al inspeccionar la escena, los especialistas hallaron, entre otros restos, pedazos de hierro que suelen ser colocados en bombas de fabricación casera para que actúen como esquirlas.
De acuerdo con esa hipótesis, los pesquisas averiguaron que Rodríguez es empleado de la mina de Farallón Negro, por lo que pudo tener acceso a explosivos, confeccionar una bomba y dejarla sobre el capot del auto para que detonara al ser manipulada por manos inexpertas. (Télam)
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