24 Junio 2013
BUENOS AIRES.- El desbalance de las cuentas fiscales, la inflación y el atraso cambiario son los principales problemas económicos de Argentina y generan un complejo círculo vicioso. Así lo advirtió la Fundación Mediterránea en su último informe, en el que explicó además que estas tres grandes dificultades están "totalmente" inter-relacionados entre sí.
"El déficit fiscal es financiado con emisión monetaria que causa y profundiza el problema inflacionario. A su vez, éste último es el determinante de la caída del poder adquisitivo del tipo de cambio oficial. Por otro lado, estas últimas dos variables, junto con el atraso de las tarifas públicas, profundizan el desbalance de las cuentas fiscales", explicó la consultora.
Asimismo, el centro de estudio señaló que el escenario económico internacional es incierto, y consideró que "difícilmente" el cuadro externo pueda ayudar a la economía local como lo hizo en la última década. "El escenario externo relevante para Argentina no resultará en el corto plazo tan favorable como lo ha sido en años anteriores. En ese contexto, el escenario macroeconómico de nuestro país pasaría a depender crucialmente de las acciones de política económica que tome el gobierno nacional", planteó.
Sostuvo que en la medida en que se privilegie la dinámica de corto plazo, algunos de los problemas actuales (inflación, sector externo) podrían agravarse, afectando las posibilidades de recuperación sostenida del nivel de actividad.
En cambio, evaluó que en un contexto con credibilidad, el anuncio de un plan consistente de ajuste en las cuentas fiscales puede reducir en el corto plazo las expectativas de inflación, aún con un salto devaluatorio. "En la medida que las autoridades comiencen a tomar acciones concretas para solucionar y reconocer tanto el problema como las causas de la inflación y para retornar a los mercados internacionales, el escenario ideal y con credibilidad comenzará a tener alguna posibilidad de concretarse", concluyó. (DyN)
"El déficit fiscal es financiado con emisión monetaria que causa y profundiza el problema inflacionario. A su vez, éste último es el determinante de la caída del poder adquisitivo del tipo de cambio oficial. Por otro lado, estas últimas dos variables, junto con el atraso de las tarifas públicas, profundizan el desbalance de las cuentas fiscales", explicó la consultora.
Asimismo, el centro de estudio señaló que el escenario económico internacional es incierto, y consideró que "difícilmente" el cuadro externo pueda ayudar a la economía local como lo hizo en la última década. "El escenario externo relevante para Argentina no resultará en el corto plazo tan favorable como lo ha sido en años anteriores. En ese contexto, el escenario macroeconómico de nuestro país pasaría a depender crucialmente de las acciones de política económica que tome el gobierno nacional", planteó.
Sostuvo que en la medida en que se privilegie la dinámica de corto plazo, algunos de los problemas actuales (inflación, sector externo) podrían agravarse, afectando las posibilidades de recuperación sostenida del nivel de actividad.
En cambio, evaluó que en un contexto con credibilidad, el anuncio de un plan consistente de ajuste en las cuentas fiscales puede reducir en el corto plazo las expectativas de inflación, aún con un salto devaluatorio. "En la medida que las autoridades comiencen a tomar acciones concretas para solucionar y reconocer tanto el problema como las causas de la inflación y para retornar a los mercados internacionales, el escenario ideal y con credibilidad comenzará a tener alguna posibilidad de concretarse", concluyó. (DyN)
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