Mansilla cruzó a Jiménez y se reaviva la interna

Si el principal botín de un peronista es el territorio, cualquier irrupción en domicilio ajeno genera recelos. Qué peor, entonces, si además de llegar sin invitación el "intruso" ocupa los minutos de micrófono para despotricar contra el "dueño de casa".

Por eso era cuestión de tiempo. Ayer, el senador nacional Sergio Mansilla no aguantó más y se despachó con todo contra el ministro de Gobierno, Edmundo Jiménez, que el viernes, durante un acto en Aguilares, había sido sumamente crítico.

"No es director de Cultura como para que no sepa qué es lo que pasa en la política tucumana", le contestó el primer candidato a legislador por el Oeste.

El viernes, el ministro Jiménez acudió a Aguilares para lanzar la candidatura a intendente de Rubén Martínez Lobo, con el afán de competir contra el actual jefe municipal, Agustín Fernández. El mitin del acople "pirinchista" se realizó en el edificio de la Sociedad de Socorros Mutuos. El ministro, que asistió acompañado de su hijo, y candidato a la reelección como legislador por el Oeste, Reinaldo Jiménez, separó de las críticas a la senadora nacional Beatriz Rojkés y al gobernador, José Alperovich. Sin embargo, en el escenario cuestionó el reparto de bolsones en época electoral y reclamó una renovación dirigencial en el peronismo.

"Este pueblo no tiene por qué ser postergado, sometido o esclavo de nadie que le venga a ofrecer limosnas, porque tiene derechos. Ni la presidenta de nuestro partido (Rojkés), ni el gobernador, ni Juan Perón, ni Evita, nunca quisieron peronistas arrodillados y que le pongan el bolsón al frente por un voto. Ellos quieren peronistas luchadores, rebeldes, atrevidos", afirmó Jiménez.

Por turnos
Apenas regresó de Catamarca, donde pasó el fin de semana, el senador Mansilla no pudo contenerse. El peronista fue intendente de Aguilares, apoya la re-reelección del actual jefe municipal y el armado electoral en la sección Oeste ya le generó roces con su ex compañero de gabinete: mientras él encabeza la lista oficial del Frente para la Victoria en esa circunscripción, el ministro de Gobierno fogonea acoples.

"No me siento aludido ni me consta que los intendentes o delegados comunales repartan bolsones, como dijo. Ahora, si él lo sabe y no logró combatir esa práctica, es ilógico que no haga un mea culpa porque es parte de este Gobierno y de este proyecto político desde hace siete años", remarcó Mansilla.

El senador destacó la gestión de los intendentes, y le sugirió a Jiménez que la renovación política de la que habla empiece por casa. "Tengo 44 años y desde hace 20 años estoy en política porque me votó la gente para que sea concejal, intendente, legislador y ahora senador. En cambio, otros están hace 30 años en política y nunca ocuparon un cargo electivo. Están desde la época de (Fernando) Riera, de (Ramón) Ortega, de (José Ricardo) Falú y de (Julio) Miranda y siguen estando por detrás de los que ponemos la cara", afirmó.

Mansilla insistió en que la postura crítica del ministro Jiménez resulta conveniente sólo para su proyecto político personal, mas no para el que encabeza el gobernador Alperovich. "No ponen la cara cada dos años en elecciones como lo hacemos nosotros, pero sí sacan provecho de los que lo hacemos", criticó el senador.