19 Octubre 2008
BUENOS AIRES.- La titular de la Agencia Nacional de Inversiones, Beatriz Nofal, aseguró ayer que no habrá recesión en la Argentina", aunque reconoció que por la crisis financiera internacional se registrará "un impacto moderado en términos de crecimiento". También enfatizó que "en el mediano plazo hay cero riesgo de default en la Argentina".
No obstante, señaló que "un momento de crisis es un momento para redoblar esfuerzo para mantener niveles de producción, empleo y solvencia financiera". A la vez que advirtió que "como sociedad la respuesta tiene que ser colectiva" y que todos "tenemos que renunciar a parte de las aspiraciones que tenemos para mantener la tranquilidad y evitar movimientos bruscos que generen pánico".
Pese a las palabras de Nofal, algunas fábricas ya están sintiendo los efectos de la crisis y anunciaron cesantías de personal. En este sentido, el secretario general del Sindicato de Mecánicos de Córdoba (Smata), Omar Dragún, advirtió ayer que en la planta de Renault están en riesgo los puestos de trabajo de unos 100 empleados fijos y otros 500 contratados eventuales. Según el gremialista, esta situación se debe a la fuerte caída en las exportaciones, que ronda "entre 100 y 150 vehículos menos por día, que iban a estar destinados a Brasil, México y Colombia".
La planta cordobesa de Renault emplea en total a unas 1.500 personas, por lo que de concretarse estos despidos, la baja sería muy fuerte. No obstante, no es la única automotriz que redujo sus previsiones de venta al exterior, dado que Fiat, Iveco y Volkswagen afrontan una situación similar. "Se han paralizado unas 50.000 cajas de velocidades de Volkswagen. Se han eliminado las horas extras, los cuatro turnos y los sábados y domingos. Iveco está esperando directivas de Brasil. Fiat ha garantizado hasta fin de año y en las vacaciones se analizará qué es lo que va a pasar en 2009", dijo Dragún.
Por su parte, en la planta uruguaya de Alpargatas, controlada por argentinos hasta que pase a manos del grupo brasileño Camargo Correa, ya se despidió a 100 empleados. Las versiones sobre una posible reducción de personal en distintas compañías multinacionales fueron ayer en aumento, a punto tal que renombrados jugadores de la industria tuvieron que salir a desmentir que se estuviera negociando el regreso a escena de la "doble indemnización". En ese escenario, el titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), Juan Carlos Lascurain, volvió a reclamar ayer una "mejora en el tipo de cambio real" para paliar los efectos de la crisis financiera en el país. "Hay que implementar las medidas que nos permitan impactar lo menos posible sobre los niveles de empleo", señaló. "El sector industrial pasa por etapas: la baja de horas extras, vacaciones, suspensiones y finalmente los despidos; hablamos de trabajadores calificados que no se reemplazan fácilmente", puntualizó, al intentar explicar lo que está sucediendo en distintos sectores en materia de empleo. (NA)
No obstante, señaló que "un momento de crisis es un momento para redoblar esfuerzo para mantener niveles de producción, empleo y solvencia financiera". A la vez que advirtió que "como sociedad la respuesta tiene que ser colectiva" y que todos "tenemos que renunciar a parte de las aspiraciones que tenemos para mantener la tranquilidad y evitar movimientos bruscos que generen pánico".
Pese a las palabras de Nofal, algunas fábricas ya están sintiendo los efectos de la crisis y anunciaron cesantías de personal. En este sentido, el secretario general del Sindicato de Mecánicos de Córdoba (Smata), Omar Dragún, advirtió ayer que en la planta de Renault están en riesgo los puestos de trabajo de unos 100 empleados fijos y otros 500 contratados eventuales. Según el gremialista, esta situación se debe a la fuerte caída en las exportaciones, que ronda "entre 100 y 150 vehículos menos por día, que iban a estar destinados a Brasil, México y Colombia".
La planta cordobesa de Renault emplea en total a unas 1.500 personas, por lo que de concretarse estos despidos, la baja sería muy fuerte. No obstante, no es la única automotriz que redujo sus previsiones de venta al exterior, dado que Fiat, Iveco y Volkswagen afrontan una situación similar. "Se han paralizado unas 50.000 cajas de velocidades de Volkswagen. Se han eliminado las horas extras, los cuatro turnos y los sábados y domingos. Iveco está esperando directivas de Brasil. Fiat ha garantizado hasta fin de año y en las vacaciones se analizará qué es lo que va a pasar en 2009", dijo Dragún.
Por su parte, en la planta uruguaya de Alpargatas, controlada por argentinos hasta que pase a manos del grupo brasileño Camargo Correa, ya se despidió a 100 empleados. Las versiones sobre una posible reducción de personal en distintas compañías multinacionales fueron ayer en aumento, a punto tal que renombrados jugadores de la industria tuvieron que salir a desmentir que se estuviera negociando el regreso a escena de la "doble indemnización". En ese escenario, el titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), Juan Carlos Lascurain, volvió a reclamar ayer una "mejora en el tipo de cambio real" para paliar los efectos de la crisis financiera en el país. "Hay que implementar las medidas que nos permitan impactar lo menos posible sobre los niveles de empleo", señaló. "El sector industrial pasa por etapas: la baja de horas extras, vacaciones, suspensiones y finalmente los despidos; hablamos de trabajadores calificados que no se reemplazan fácilmente", puntualizó, al intentar explicar lo que está sucediendo en distintos sectores en materia de empleo. (NA)
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