Muchas veces se habla de que la Vía Láctea (nuestra galaxia) va a chocar con la galaxia Andrómeda. ¿Es esto posible? ¿Cuándo ocurriría?
Las galaxias se mueven y se pueden acercar unas a otras. En Astronomía se dice colisión o interacción de galaxias. Son eventos muy raros y que duran periodos largos de tiempo. Son procesos muy complejos y de resultados variados. Una interacción de dos galaxias no siempre tiene el mismo resultado, depende del tamaño, de las masas y de sus formas. Algunas veces el resultado es una galaxia formada por las estrellas de las dos, y esto se suele llamar Canibalismo o Fusión de Galaxias. En otros resultan dos galaxias muy diferentes a las iniciales y algunas veces solo cambian levemente su forma.
Aun con la tecnología actual no se puede observar una interacción completa porque son procesos muy largos. Se han observado galaxias que están cercanas y que están comenzando a intercambiar material, algunas acercándose, otras interactuando, etc. En base a esas observaciones se construyen modelos y se trata de reproducir todo el proceso.
La Vía Láctea y la galaxia de Andrómeda se acercan a gran velocidad (300km/s). Se calcula que, en aproximadamente 4.000 millones de años se producirá la colisión y que el proceso durará unos 2.000 millones de años. La galaxia de Andrómeda es una galaxia espiral gigante, parecida en su forma a la Vía Láctea, pero mucho más grande y con más estrellas. Se cree que el resultado será una galaxia enorme a la que algunos llaman Lactómeda. o Milkómeda. Sería un caso típico de canibalismo galáctico.
Hay algunas evidencias de que en la Vía Láctea hay estrellas con características especiales que serían de origen extragaláctico, lo que indicaría que ya tuvo interacción con otras galaxias.
¿Qué pasará con la Tierra y el Sol cuando se produzca la colisión entre la Vía Láctea y Andrómeda?
Quizás no ocurra nada, porque aunque hay millones de estrellas en las galaxias, ellas están muy separadas entre sí. Pero dos o más estrellas podrían ser atraídas por la fuerza de gravedad de las otras. Si fuesen solo dos estrellas, podría ocurrir que queden atrapadas en el campo gravitatorio y que formen un sistema binario; los planetas podrían desaparecer y si no lo hiciesen la vida en la Tierra no sería posible.
Si las estrellas chocasen y ambas se moviesen a baja velocidad se fusionarían formando una estrella más grande, pero si tuviesen altas velocidades se produciría una explosión violenta, liberando mucho material y podrían hasta arrasar con estrellas cercanas. En ambos casos los planetas del Sistema Solar desaparecerían.
Pero hay que recordar que para el momento en que ocurra la colisión, probablemente los planetas hayan sido absorbidos por el Sol, que estará en la última etapa de su vida.








